Vitoria - “¿Qué está pasando con algunos hombres? ¿Qué está pasando con algunas mujeres?”. Bajo este doble interrogante, las artistas Amaia Ochoa y Oitia Ortiz de Lazkano, tía y sobrina, se cuestionan desde hoy y hasta el 21 de septiembre en la sala ARTgia “qué está ocurriendo en estos momentos con respecto a la violencia ejercida hacia las mujeres”.
La exposición Reflexiones sobre mujeres abre el curso cultural en la galería de la calle José Lejarreta de la mano de Irantzu Lekue, coordinadora de un espacio que tiene en Oitia Ortiz de Lazkano, con 17 años, a “la autora más joven que hemos acogido en la sala”, apunta Lekue. Ochoa y Ortiz de Lazkano han sido las encargadas de inaugurar la vuelta tras las vacaciones en ARTgia con una muestra en la que ambas quieren “abrir un marco de reflexión a lo que está ocurriendo en estos momentos con respecto a la violencia ejercida hacia las mujeres. Con cómo nos han contado nuestra historia y cómo ve, cómo percibe una mujer de 17 años lo que le rodea”, explican. A Irantzu Lekue, la idea de que la joven artista “llevase a cabo este proyecto junto a Amaia me cautivó”.
“Une dos perspectivas que suelen estar demasiado alejadas y comenzar el curso con una exposición de dos artistas de Araba que abordan un tema así nos ha parecido muy adecuado”, subraya. De este modo, con 38 años de diferencia, tía y sobrina despliegan sus diferentes puntos de vista y sus reflexiones sobre su género en base a preguntas sobre las que encontrar, o no, respuestas. Cuestiones como “en qué punto estamos las propias mujeres, cómo educamos a nuestras criaturas, a nuestros compañeros, padres y amigos. Cómo cuidamos nuestros propios comportamientos, nuestro lenguaje. Nosotras somos las primeras que tenemos que analizarnos con mucho cariño, sin culpa y sin juzgar cómo estamos actuando ante la violencia ejercida sobre nosotras”, resaltan Ochoa y Ortiz de Lazkano.
“En cuanto aceptemos nuestra propia responsabilidad en el asunto dejándonos hablar, escuchándonos con una mente, orejas, ojos y todos nuestros sentidos abiertos, entonces cambiarán las cosas”, aseguran ambas autoras, que reivindican a pensadoras como la escritora Naomi Klein.
En Reflexiones sobre mujeres, las artistas analizan “de una forma superficial pero muy gráfica” seis diccionarios enciclopédicos en los que “vemos la proporcionalidad entre hombres y mujeres que aparecen en las fotos”. “¿Cuántas teorías estudiadas y desarrolladas por mujeres han salido a la luz mediante sus maridos, acalladas ellas?. Tenemos que darnos cuenta de esto para que no se vuelva a repetir. Principalmente, porque no queremos pasar del hombre explotador a la mujer explotadora. No queremos que haya explotación, para ello hay que encender la revolución anticapitalista”, valoran desde ARTgia.
enciclopedias desechadas Parte de la obra tiene su origen hace dos años, cuando Amaia Ochoa cambió completamente de registro laboral y pasó a trabajar en un garbigune, donde sin embargo también supo extraer el arte que reside en los objetos que nadie quiere. Allí, gracias a las enciclopedias lanzadas a la basura, comenzó a recortar rostros de las mujeres que aparecían en las enciclopedias. Un proceso que queda reflejado en una de las paredes de la galería repartidos en diferentes lienzo.
“Aprovechando que anteriormente no hemos tenido palabra, este es el momento de decir exactamente lo que llevamos mucho tiempo guardando. Hoy en día, aunque demos la imagen de avanzar hacia la igualdad con diferentes actos, como puede ser, la manifestación del 8M, no progresamos suficiente. La cuestión es a qué dirección está dirigiéndose la lucha feminista de hoy en día. Cada vez más se contemplan las reformas del gobierno, y esto no han sido nunca el camino a la revolución”, argumentan Ortiz de Lazkano y Ochoa, dos generaciones de artistas que han decidido “plantarse” y, “después de asistir a un curso de anarcofeminismo”, compartir sus diferentes puntos de vista sobre la violencia ejercida hacia la mujer, relatan desde la galería gasteiztarra.
Amaia Ochoa estudió en la Escuela de Artes y Oficios de Vitoria en diferentes etapas y por diferentes disciplinas, realizando también estudios de Interiorismo y de Diseño Gráfico en la Escuela Superior de Diseño. En los noventa trabajó como muralista, pintora de escenografías y de edificios, además de ser profesional dentro del mundo del diseño gráfico. Ha estado siempre vinculada al mundo del arte y ha recibido diferentes premios tanto en pintura como en diseño gráfico a lo largo de su trayectoria. Hace veinte años aproximadamente le encargaron desde la Asamblea de Mujeres de Álava una postal para el día contra la violencia machista, La lágrima azul, y desde entonces ha realizado dos obras que no habían visto la luz hasta que ahora las ha desempolvado, analizando la forma en la que dos décadas han alterado su contexto.
Por su parte, Oitia Ortiz de Lazkano, estudiante de Segundo de Bachillerato de la rama ciencias sociales y activista de ideología anticapitalista, empezó a formarse asistiendo a diferentes actividades sobre feminismo, antirracismo, anticapitalismo, anarquismo, comunismo, “lo que causó la entrada a diferentes colectivos de la ciudad para pasar a la práctica”. La colaboración con su tía es su primer contacto con el mundo del arte.