Vitoria. "Gazterock", impulsado por el Instituto Foral de Juventud de Álava y la Asociación Cultural Hell Dorado de Vitoria desde hace once años, reúne entre el 1 y el 12 de julio a jóvenes de 15 a 17 años de Álava, Gipuzkoa, Galicia, Madrid y Extremadura.
La música en un concepto amplio es el hilo conductor de todas las actividades de estas colonias, que abarcan facetas como la composición, producción, promoción y también la historia del rock, ha explicado a Efe el coordinador del campamento, Egoitz Conte.
El taller "vehicular" se llama "Combos" y en él los chavales forman bandas, a las que ponen nombre, y ensayan varios temas de distintas épocas y estilos que interpretan después en el gran concierto que pone el punto final al campamento.
Este miércoles se ha celebrado precisamente el ensayo general del recital, al que ha asistido la diputada de Cultura de Álava, Ana del Val, que ha visionado además el cortometraje grabado por los chavales, ha escuchado un tema compuesto por ellos mismos y ha disfrutado con las versiones que uno de los grupos ha interpretado sobre el escenario mientras sus compañeros coreaban las canciones y los jaleaban como en un auténtico concierto de rock.
La verdadera prueba de fuego será esta misma tarde en Hell Dorado cuando tenga lugar el concierto final del campamento. Por el escenario pasarán los doce grupos creados en "Gazterock", algunos de los cuyos integrantes llegaron a Vitoria el 1 de julio sin saber tocar un instrumento.
Los conocimientos musicales no son un requisito indispensable y se suplen con ganas, según señala Conte. Este año el nivel general ha sido inferior al de ediciones anteriores pero se ha compensado con la "ultramotivación" de los chavales, que se notó desde el primer día y que ha permitido que en el ensayo general de esta mañana la música roquera sonara con calidad.
El buen ambiente que se ha creado en estos días y el apoyo mutuo que se prestan los chavales -tapándose las carencias unos a otros- han contribuido a que participantes sin conocimientos musicales sean ahora capaces de subir a un escenario y tocar los acordes suficientes de guitarra y bajo -e incluso batería- para completar el tema.
En estos casos los monitores de los talleres musicales enseñan "lo básico para tocar las canciones" y cuando los chavales comprueban que estas suenan bien "bajan del escenario súper emocionados".
Pero "Gazterock" no se limita a enseñar a tocar y componer, sino que les acerca a otras facetas de la producción musical como el "merchandasing". En este taller cada banda diseña sus propios productos de promoción: logotipo, pegatinas, chapas e incluso camisetas, que forman parte después de la puesta en escena de ese gran concierto del último día.
En el taller de producción musical los chavales componen su propio tema desde cero, en el de fotografía se sacan las instantáneas que serán la "imagen" de las bandas, en el taller de audiovisual se trabaja en la grabación de un corto y en historia de la música se les explica cómo y en qué contexto surgieron los distintos estilos.
En apenas doce días se genera un vínculo muy potente y es habitual que los chavales que participan un año repitan al siguiente. "Una buena señal", apunta Conte, que destaca además que en esta ocasión una de las cursillistas de ediciones anteriores ha pasado a ser monitora, lo que demuestra que en el rock hay cantera.