DONOSTIA. Las secuencias de playa que el director de cine Wody Allen rodará durante julio y agosto para su próxima película en San Sebastián transcurrirán en La Concha y no precisarán el cierre completo del arenal donostiarra más emblemático, pues las afecciones que originará serán "parciales" en cuanto a duración y extensión.
Así lo ha precisado este martes el alcalde de la ciudad, Eneko Goia, quien, a preguntas de los periodistas en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno Local, ha tranquilizado a los donostiarras y visitantes asegurando que no hay lugar para "alarmarse" dado que "el impacto" que tendrá el rodaje "será limitado".
Goia ha sido extremadamente discreto a la hora de desvelar detalles sobre el trabajo que desarrollará Allen y su equipo en la capital guipuzcoana y se ha limitado a confirmar que la película tendrá "escenas de playa", que no serán ni en Ondarreta ni en la Zurriola, sino en La Concha, pero que no será necesario "cerrarla toda ni durante varios días" como se rumoreaba.
Aunque el rodaje se desarrollará durante casi mes y medio, del 10 de julio al 23 de agosto, ha afirmado que las afecciones en la ciudad serán "puntuales" porque el director neoyorquino rodará escenas tanto en interiores como en exteriores.
Según ha indicado, "habrá localizaciones interiores, en distintos edificios" de San Sebastián, como el de la antigua sede del Banco de España, un sobrio inmueble en desuso ubicado en pleno centro, así como en exteriores, repartidos entre "lugares céntricos y otros alejados", ha indicado el alcalde, quien ha confirmado que la producción cinematográfica grabará también secuencias "en otros términos municipales", como el pequeño pueblo pesquero de Pasai Donibane.
"Hay muchos sitios y muy diferentes", ha señalado el alcalde, quien ha agregado que previsiblemente la próxima semana se darán a conocer las afecciones concretas que causarán los trabajos cinematográficos del prestigioso realizador norteamericano.
La nueva película de Allen, de la que aún no se conoce el título, contará en el reparto con la actriz española Elena Anaya y el alemán Christoph Waltz, acompañados por Louis Garrel, Gina Gershon, Sergi López y Wally Shawn.
Se trata de una comedia romántica que discurre en el contexto del Festival Internacional de Cine de San Sebastián.