Madrid - El director catalán Carlos Marqués-Marcet estrena el 28 de junio Los días que vendrán”, la película con la que ganó la Biznaga de Oro del Festival de Málaga, que sigue con imágenes reales el embarazo de su protagonista, pero desde una ficción que “casi se fue contando a sí misma”.
“Creo que es la película que menos he dirigido, porque teníamos una base y solo había que seguirla. Teníamos las preguntas que queríamos hacernos, pero no sabíamos cómo materializarlo. Así que, sin prisas, dejamos que la peli se fuera haciendo ella sola”, explica el realizador de 10.000 kilómetros (2014), su ópera prima, que le valió un Goya como director novel.
Rodada en catalán, la película surgió durante el rodaje de Tierra firme (2017), segundo filme del barcelonés, cuando la pareja de David Verdaguer, María Rodríguez Soto, también actriz, se quedó embarazada. “La idea de rodarlo se le ocurrió a Carlos”, desvela Verdaguer, protagonista de los tres largometrajes que firma el director.
“10.000 km hablaba de las relaciones a distancia y el planteamiento de tener una familia o no; Tierra firme, de los nuevos modelos de familia, y cuando supo que María estaba embarazada me encomendó pedírselo. Yo no estaba convencido -agrega-, pero María dijo sí enseguida”.
“Desde el principio íbamos a crear unos personajes, sin hablar de nuestros problemas con el embarazo sino de los de esta pareja, cuyo punto de partida es radicalmente diferente al nuestro”, comenta Rodríguez Soto. “Pero no vamos a negar que hay una realidad física, que es cómo evoluciona mi cuerpo, eso sí es documental”, añade la actriz.
sin guion, un presente continuo Así, sin guión, cuenta Marqués-Marcet, empezaron una película “en presente continuo” sobre las relaciones humanas que cerraba “un tríptico”.
Marqués-Marcet reniega de la autoficción, de “esa moda de coger la idea del yo y transformarlo”, porque básicamente, dice, lo que le gusta “es trabajar desde la mentira”. Y a la pregunta de precisar que es auténtico en la película, el catalán se bromea con un “la realidad es una palabrota”.
Así ocurre Los días que vendrán, simulando la vida de una pareja que lo es en la vida real justo en el momento en el que ambos descubren que ella está embarazada; la decisión de Vir y Lluis de seguir adelante con el bebé aún cuando no llevan mucho tiempo juntos y apenas se conocen, o cuáles son sus opciones de vida si pasan a ser tres. - Efe