Vitoria - Siempre ha estado considerado como un espacio único dentro de la sede de la Escuela de Artes y Oficios para hacer y acoger una multitud de propuestas abiertas al público. Sin embargo, el uso del paraninfo se ha visto siempre perjudicado por diferentes razones -también económicas-, siendo la última y principal que el local incumplía la normativa de accesibilidad.
A lo largo de los últimos meses, se han venido haciendo una serie de trabajos para solventar esa circunstancia, trabajos que han afectado, como ya publicó este periódico, a la programación de exposiciones del centro, que ha tenido que reubicar en el calendario del próximo curso algunas de las muestras que tenía previsto en éste. Aún así, en Artes y Oficios se ha dado por bueno este trastoque de agenda no previsto en un principio ya que el edificio de Conde de Peñaflorida va a salir ganando con la recuperación del paraninfo, ya que se quiere que sea referencial dentro de la actividad cultural hacia el exterior de la escuela. De hecho, en la pasada edición de Poetas en Mayo ya se llevó a cabo alguna actividad en su interior.
Con todo, es ahora cuando el centro ha querido, de manera oficial, arrancar el camino de la sala con la exposición colectiva Escenas de la escuela, muestra que está compuesta por un total de 17 micro-espacios representativos de los diferentes talleres que se desarrollan dentro del proyecto formativo y cultural de Artes y Oficios: cuero, dibujo, imagen digital, escultura, fotografía, cine digital, grabado, creatividad infantil, encuadernación, cerámica, talla de madera, juego del arte, arte joven, acuarela, pintura, dibujo natural y retrato. La propuesta se inauguró ayer mismo y se podrá visitar en horario de apertura del centro hasta el próximo mes de octubre. Cabe recordar que, al mismo tiempo y hasta mediados de septiembre, también se pueden visitar las producciones Horizontes de Ana García Hermoso y Al borde del bordillo de José Ramón Aguirrezábal.
Más allá de la programación expositiva que se vaya a construir en torno al recuperado paraninfo, la idea de los responsables del centro pasa por aprovechar esta amplia sala para poder llevar a cabo encuentros, charlas, proyecciones audiovisuales, pequeños conciertos, recitales, presentaciones... es decir, y siempre dentro de las posibilidades, una agenda activa que compartir con las casi mil personas matriculadas para el próximo curso y con la ciudadanía en general. Así se podrá visualizar a partir de otoño.