Desde mediados de la semana pasada, Mendizabala se está transformando un año más para acoger la decimoséptima edición del Azkena Rock Festival que arrancará mañana. De hecho, casi todo está listo ya tanto en lo que a los escenarios se refiere como a otras instalaciones. Cabe recordar, por cierto, que para quienes acudan hoy desde fuera y tengan cogido el acceso al camping anexo al recinto, éste abrirá sus puertas a las 17.00 horas. A partir de ahí, sólo quedará que las más de 30 bandas que van a conformar el cartel comandado por Van Morrison y Joan Jett & The Blackhearts inunden la capital alavesa de música hasta bien entrada la madrugada del sábado al domingo.
A la espera de las ventas que se puedan dar en las últimas horas, la promotora vasca Last Tour espera que la asistencia global de este año se encuentre entre las de 2016 y 2017, es decir, que entre las 30.000 y las 35.000 personas sumando ambas jornadas. “Hay una competencia mucho más fuerte” entre los festivales “y aunque otros no se dedican al rock como nosotros, sí compiten por algunas bandas que, de hecho, ya han estado aquí”, según apuntó ayer Alfonso Santiago, una complicación a la hora de negociar y confeccionar la oferta que ha llevado al certamen a ser más conservador en determinados gastos.
“Estamos manejando cifras de asistencia algo menores que el año pasado y eso nos ha llevado a reducir en algunas cuestiones, aunque hemos reforzado la apuesta en servicios básicos”, como lo relacionado con la gastronomía. Por ello, en esta ocasión no se usará las pulseras cashless del año pasado y todos los pagos dentro del recinto se harán en metálico. “Es una tecnología muy cara”.
Pero más allá de esta cuestión, el ARF se presenta a su cita de 2018 bajo los mismos parámetros e intenciones de los últimos años, con la idea de ser la gran fiesta para los miles de azkeneros que van a concitarse una vez más en la capital alavesa. Público que lleva ya tiempo, a pesar incluso de los últimos retoques en el cartel, diseñando cómo ver todo lo que quiere en los tres escenarios del recinto y el espacio Trashville. Tablas principales, por cierto, que un año más estarán dedicados a diferentes músicos fallecidos en los últimos doce meses como Tom Petty, Malcolm Young (el principal), Fats Domino y Charles Bradley (el segundo) y Johnny Hallyday y Grant Hart (el tercero).
Por cierto que, como está sucediendo desde hace tres años, quienes acudan al ARF 2018 ya podrán empezar a hacer sus planes de cara a 2019. En concreto, el próximo año el festival, que vuelve a tener a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA como medio oficial, volverá a tomar la ciudad los días 21 y 22 de junio.
Pero eso ya llegará. De momento, toca disfrutar de sonidos, reencuentros, nuevas amistades... y de todo lo que conlleva reunir a la familia azkenera, que desde el principio viene definiendo una personalidad y carácter propio y distintivo con respecto a otros festivales. Hoy será el Osteguna Rock, entre otras citas, quien pida paso. Mañana y el sábado el ARF desplegará sus alas.