Vitoria - Con un “catálogo de los diferentes estilos de la danza contemporánea que se están dando ahora en Europa”, la compañía Dantzaz regresa este viernes al escenario del Principal en el marco de la actual programación invierno-primavera de la Red de Teatros. Como es habitual, el encuentro con el público se producirá a partir de las 20.30 horas, quedando todavía entradas disponibles en taquilla, aunque cabe recordar que media hora antes, el grupo alavés Anezka hará su segunda participación en los actos del centenario del edificio de la calle San Prudencio con la presentación de una nueva pieza de formato breve.

Tras ello, el proyecto asentado en Gipuzkoa propondrá a los presentes Growing young, una colección de cuatro coreografías realizadas por Itzik Galili, Janis Claxton, Daniele Ninarello y Wubkje Kuindersma, piezas que si bien tienen algunos puntos en común, recorren senderos distintos. Una variedad con la que el grupo quiere tentar a públicos diferentes, ganando así espectadores para una danza contemporánea que “sigue siendo una gran desconocida”, según Fernando Sáenz de Ugarte, director general de Dantzaz.

Para dar la vuelta a esa situación, la compañía busca ofrecer calidad, variedad y capacidad, algo que en el caso de este espectáculo está en manos de los doce jóvenes bailarines que, en estos momentos, componen la formación. A través de ellos se harán realidad, partiendo incluso del patio de butacas, las cuatro coreografías que sus autores han realizado dentro de un programa de colaboración con diferentes casas de la danza de Europa.

Miradas jóvenes para intérpretes jóvenes. Ahí está la filosofía con la que Dantzaz lleva trabajando desde su origen, consiguiendo lo que pudiera parecer la cuadratura del círculo: “crecemos manteniendo la juventud”. No en vano, cabe recordar que, en el caso de su elenco, el grupo no permite que sus integrantes estén en plantilla más de dos años. De hecho, en este 2018 van a recibir a su bailarín número 100.

Eso sí, como reconoce Sáenz de Ugarte, a la danza contemporánea en el Estado le queda mucho camino por recorrer no sólo de cara a los potenciales espectadores, sino también de cara a los programadores. “Con la exhibición seguimos teniendo un problema e importante; y eso que cuando vas a otras partes de la península, nos dicen que aquí somos unos privilegiados”, comenta el director general del grupo.