El arte vasco sigue presente en la feria con dos galerías, la regentada en Madrid por el navarro Moisés Pérez de Albéniz y la bilbaína Carreras Múgica, y una buena representación de creadores cuya obra se reparte por diversos estands. Ángel Bados, Carlos Irijalba, David Rodríguez Caballero y Miren Doiz, ya habituales de esta gran cita con el mercado del arte actual, siguen representados en ARCOmadrid 2018, donde además tendrán obra las también navarras June Crespo y Greta Alfaro, y artistas vascos como Txomin Badiola, Jon Mikel Euba, Elena Aitzkoa, Esther Ferrer, Iñaki Garmendia, Kepa Garraza, Pello Irazu, Cristina Iglesias, Abigail Lazkoz, Itziar Okariz, Juan Pérez Agirregoikoa, Xabier Salaberria o Ignacio Sáez. No faltarán tampoco en estands de varias galerías piezas de dos grandes del arte -reclamos seguros- como Jorge Oteiza y Eduardo Chillida.

Para el galerista navarro asentado en Madrid Moisés Pérez de Albéniz esta es su 19ª participación en Arco, una feria en la que, dice, “desde hace tres años ya notamos bastante subida en visitas y ventas”, dice, consciente de que al desaparecer con la crisis económica eventos artísticos de cierto nivel que había en el Estado -bienales en Sevilla o Valencia, otras manifestaciones en Barcelona-, a la gran feria de Madrid se le está dando demasiada responsabilidad. “Ahora nos queda Arco, nada más. Se ha convertido en la Documenta, la Bienal, en el evento artístico más importante. Arco está haciendo de todo, cosa que no es que esté bien, porque tampoco hay que darle tanta responsabilidad a la feria...”, dice.

Su estand de este año, de unos 100 m2, se enriquece con obras de los artistas navarros Ángel Bados, Carlos Irijalba y Miren Doiz, que conviven con piezas de Johanna Calle, Victoria Civera, Santiago Giralda, Guillermo Mora, Muntadas, Juan Ugalde y Juan Uslé. “Lo que me planteo es que la obra de cada uno se vea con dignidad. Si no, caemos en un ruido escénico que no me gusta. Dedico una pared a cada artista, procuro que entre ellos puedan establecer algún diálogo. Quiero un estand sosegado”, dice Pérez de Albéniz, quien en estos momentos trabaja mucho con la pintura, a través de “artistas emergentes, artistas de media carrera y artistas consolidados”, y los tres tipos de creadores estarán representados en Arco. También el arte de vertiente sociopolítica, asegurado con Muntadas.

La galería bilbaína Carreras Múgica cumple ya 21 años en Arco. “La pasada edición fue bastante bien. Hubo ventas de casi todos los artistas y a diferentes tipos de coleccionistas: particulares, instituciones y a extranjeros, por lo que este año estamos animados”, dice el galerista Ignacio Múgica. Como es habitual, llevará este año una representación de los creadores de su galería, pero “incorporando dos novedades y las dos navarras”: los artistas Ángel Bados (Olazagutia, 1945) y June Crespo (Pamplona, 1982). “Con Ángel Bados hemos expuesto por primera vez en la galería este pasado septiembre Para ambos lados de la frontera y con June Crespo estamos exponiendo actualmente Ser dos”, apunta.

Del primero presentará en la feria varias esculturas de las que destaca la obra que dio titulo a la mencionada exposición, realizada en plomo; y de June Crespo, varias esculturas de su serie Instrumentos y fetiches. “Son ensamblajes hechos a partir de objetos cotidianos fundidos en bronce”, explica el galerista bilbaíno. “Entre ambos artistas hay una generación de diferencia, sin embargo, su trabajo responde a unas inquietudes muy semejantes y hay una coherencia muy sólida en sus esculturas”, añade. Además, su estand contará con obras de Txomin Badiola, Chillida, Raúl Domínguez, Jon Mikel Euba, Pello Irazu, Erlea Maneros Zabala, J. P. Agirregoikoa, Itziar Okariz y Richard Serra.