getafe - El escritor Eduardo Mendoza recibió ayer el VIII Premio José Luis Sampedro del festival Getafe Negro, un galardón que recibe con “mucha alegría” y con ironía: “Nunca sobran los premios. Si te tocan el Gordo y el Niño, no te enfadas”. Antes de la entrega del premio, que tuvo lugar en la Universidad Carlos III de Madrid, Mendoza explicó a los medios que “todos los premios son estupendos, pero este tiene su cosa”. “El Premio Cervantes es institucional; este también lo es, pero más casero”. Además, aseguró que José Luis Sampedro, que da nombre al galardón, era un “amigo muy querido” y un escritor “comprometido con su tiempo”.
Previamente, el autor (Barcelona, 1943) tuvo una charla con el escritor y comisario de este festival, Lorenzo Silva, ante alumnos de Secundaria de institutos de la zona, que pudieron formularle preguntas. Durante esta charla, Mendoza hizo un recorrido por su carrera y desveló que comenzó a escribir “antes de tener uso de razón”, y bromeó: “Eso no quiere decir que la tenga ahora”. El creador de Gurb reconoció que lee “poco los periódicos”, aunque abundan entre sus aficiones las novelas y los libros de poesía. “Me parece más necesario para mí, igual que un médico lee más revistas de medicina que las declaraciones del Congreso”, sostuvo Mendoza.
Asimismo, admitió que no recuerda “un momento” en su vida sin haber estado leyendo y escribiendo, ya que eran “de las pocas diversiones y fuentes de información que había en ese momento”. “Cuando publiqué la primera novela, llevaba 30 años escribiendo”, apuntó el autor de La verdad sobre el caso Savolta, quien además destacó que la lectura de los clásicos de la literatura ha sido clave para su narrativa, ya que proporciona “unos cimientos que permiten escribir cualquier cosa con una cierta seguridad”. “No podría haber escrito Sin noticias de Gurb sin Calderón de la Barca. Puedes hacer tapas, pero tienes que saber cómo se hace un puchero”, indicó. Y subrayó que “ahora la gente joven vive en un sitio mucho mejor que antes, pero no tiene la droga tremenda de sumergirse en el mundo de Los tres mosqueteros”.
En cuanto a los jóvenes, el premio Cervantes 2016 consideró que se les ofrece “una lectura repelente”, pero “bien intencionada”, llena de “corrección política”, en la que se muestra que hay que “ayudar a los necesitados o a los refugiados”, algo que “está bien, pero es más convivencia que literatura”. Y puntualizó: “Los adolescentes tienen un nivel de experiencia literaria corto y de vivencias largo, similar al que tenía una persona de treinta años en mi época”.
Sobre su técnica a la hora de escribir un libro, desveló que sigue “escribiendo a mano”, aunque se maneja “bien” con las nuevas tecnologías. “Tengo una pluma estilográfica para cada tipo de libro”, precisó. En cuanto a su estilo, tan marcado por el humor, Mendoza explicó que sigue la tradición de la literatura clásica, algo que cambió en el siglo XIX, cuando los libros se volvieron muy serios, salvo Charles Dickens.
otro premio para jesús tíscar Por otro lado, el escritor Jesús Tíscar fue otro de los galardonados en el X festival Getafe Negro, en su caso con el Premio de Novela Negra Ciudad de Getafe por su obra La japonesa calva. Según destacó el consejero de Cultura, Turismo y Deportes, Jaime de los Santos, que hizo entrega de los premios, la obra de Tíscar destaca por estar “a caballo entre lo amargo, lo disparatado y el thriller, salpicada de humor e ironía”. - Efe