Sevilla - Sálvame, el programa de la tarde de Telecinco, hizo pública la obsesión secreta de María José Campanario, la esposa del torero Jesulín de Ubrique. Campanario tiene guardadas en su casa bastantes cajas llenas con información sobre la expareja su marido, Belén Esteban. Esta información fue corroborada por una persona muy cercana al matrimonio, que incluso, como dijo el colaborador Kiko Hernández, llegó a ver con sus propios ojos estos archivos.
En el programa de ayer el colaborador narró la obsesión más oculta de María José y es que guarda todo tipo de información sobre Belén, tiene cientos de recortes sobre publicaciones de varios medios del corazón en los que ha sido protagonista la expareja de su marido.
Kiko Hernández hizo referencia a que Campanario “tiene unos comportamientos extraños en su vida normal”. Y es que esta obsesión viene de unos años atrás. Además, todos los datos, las fotografías y los recortes que tiene sobre ella están clasificados según el año, el medio que lo publicó o incluso el cambio de look que se había hecho en ese momento Belén.
Una noticia propia del argumento de una película que roza el problema obsesivo, según insinuó el propio colaborador. Además, según apuntó Hernández, la esposa del torero suele repasar sus archivos, es decir, de vez en cuando extiende todos los recortes encima de su cama por si falta alguno de ellos. Además, esta información fue corroborada por María Patiño, quien asegura que es absolutamente cierto y que a ella también se lo contó alguien del entorno más cercano de la pareja.
Otro tema a destacar estos últimos días ha sido el cambio de look de Campanario, ya que con su nuevo color de pelo tiene un cierto parecido a Belén Esteban.
Sobre la noticia, Belén Esteban aseguró que estaba atónita. Y confesó que tanto ella como su pareja “están alucinando”. Sin embargo, también añadió que está un poco “preocupada” ya que es una situación que le da “un poco de miedo”.
su salud La odontóloga sufre fibromialgia, una enfermedad que le reporta grandes dolores y noches sin dormir. Debido a esta situación, la mujer de torero tuvo que ingresar en El Seranil para ser tratada. Además, a este problema se suma el reciente golpe de calor sufrido por Jesulín en una plaza de toros de un pueblo abulense.
En el último año Campanario ha tenido que ingresar en el hospital hasta en cinco ocasiones. Lleva doce años luchando contra esta enfermedad. “Tengo que ingresar cuando ya no puedo soportar el dolor de mil cuchillos sobre mi cuerpo”, afirmó.
Campanario tardó mucho en saber que la padecía, ya que es una enfermedad de difícil diagnóstico y sin cura. “Las enfermedades reumáticas son complicadas, y básicamente lo que hacen cuando tengo una crisis es paliar el dolor”, aseguró a la vez que afirmó que el mayor problema es que es intolerante a un “abanico muy amplio de analgésicos”. - DNA