los ángeles - La actriz mexicana Stephanie Sigman, que sorprendió al mundo en Miss Bala y como “chica Bond” en Spectre, se pasa ahora al terror en Annabelle: Creation y, en una entrevista con Efe, afirma sentirse “privilegiada y afortunada” por ser parte de esa popular franquicia iniciada por Expediente Warren.
“Tiene un equipo exitoso, importante y creativo. Es una franquicia con muchos seguidores a los que les encanta este universo. No pude caer en mejores manos”, indicó la intérprete nacida en Ciudad Obregón.
En el filme, Sigman interpreta a Charlotte, una monja dedicada al cuidado de un grupo de niñas sin hogar que comienzan una nueva etapa en casa de los Mullins (Anthony LaPaglia y Miranda Otto), un matrimonio que años atrás sufrió la pérdida de su única hija. Sin embargo, la ilusión por llegar allí se torna en una pesadilla cuando comprueban la presencia de un espíritu maligno encerrado en la muñeca preferida de la hija de los Mullins.
“Es una historia muy bien contada e interesante. Tiene un reparto formado en un 90 por ciento por mujeres y me encantó la visión del productor, Peter Safran”, explicó la mexicana. Además, según la actriz, “no me fue difícil ponerme en su piel porque es alguien que decidió creer y tener toda su fe en Dios. Eso es bonito y admirable. Yo creo en Dios”, manifestó Sigman.
La intérprete reconoció que percibió “una energía diferente” dentro del plató, hasta el punto de que le daba miedo en ocasiones, pero admitió que, cuanto más se metía en el papel, más fuerte se sentía. “Siempre iba al set con mi Biblia y oraba cada día. Cada vez me sentía más poderosa. No sé si es algo que venía de mi personaje o de mí, pero sentía que Dios me cuidaba todo el tiempo”, declaró.
Los temores dentro de un rodaje de una cinta de terror no son nada nuevo en Hollywood, pero en este caso incluso apareció un cura para bendecir el plató y las muñecas con las que se rodaba. “¡Yo lo pedí! Le dije a Peter que antes de mis escenas con la muñeca tenía que llevar a un sacerdote para bendecir el set. Si no, yo no iba a tocar la muñeca”, confesó Sigman entre risas.
Expediente Warren: The Conjuring (2013), con un presupuesto de 20 millones de dólares, recaudó 318 millones en todo el mundo, y la segunda parte, Expediente Warren: El caso Enfield (2016), ingresó una cifra similar a partir de 40 millones de presupuesto. Annabelle, la primera cinta escindida de esa saga, sumó más de 250 millones de dólares con un ínfimo presupuesto de 6,5 millones y ahora su secuela llega el viernes a los cines de EEUU con intención de seguir esa estela. Para el futuro, habrá una tercera parte de Expediente Warren, además de otras cintas escindidas como The Nun y The Crooked Man. Sigman admitió que, por ahora, no aparecerá en otras películas de este universo. - A. M. Guirado