Vitoria - Es domingo. Principios de julio de 2016. Jon acaba de sufrir un ictus. El suceso reúne en su Barcelona de residencia a quienes conformaron su cuadrilla de amigos en su ciudad natal, Gasteiz. Sin entrar en más detalles, en ese marco general arranca Si hubieras bailado para mí, la primera novela que publica la arquitecta y escritora vitoriana Inés Apraiz Castellanos. Desde marzo, la versión para ebooks se encuentra disponible en Amazon, aunque es ahora cuando también en las librerías se puede encontrar en formato físico. Eso sí, la presentación oficial se producirá el próximo día 30, acto que tendrá lugar a las 19.00 horas en la Casa de Cultura Ignacio Aldecoa.
El amor, la amistad y la no siempre fácil relación entre ambos sentimientos se encuentran en la base de un argumento que se inicia con ese reencuentro de viejos amigos que cuando se ponen a hacer balance, a recordar, se asoman a historias entrelazadas donde no todas las situaciones, relaciones y momentos están resueltos, sino que permanecen latentes desde el pasado esperando ser despertados o permanecer en silencio para siempre. Así le sucede al protagonista principal, a un periodista que dejó primero Vitoria y después Barcelona para acabar en Washington triunfando, por lo menos en apariencia, en la vida personal y profesional.
“Me gusta la idea de que quien pueda leer el libro se identifique con un aspecto, un personaje o un momento. Incluso si se trata del sentimiento de perdida”, apunta la autora, al tiempo que aclara que “nadie es nadie, aunque es evidente que hay detalles de la vida real que he incorporado para componer algunas situaciones y personajes”.
La historia actual, sin moverse de Barcelona, transcurre entre ese mencionado domingo y el siguiente sábado. Mientras esos siete días avanzan, la novela viaja a las últimas décadas de Vitoria, a las fiestas de La Blanca, a Casa Quico, a... “Yo nací en el 71 y mis personajes son del mismo año”, un diario generacional que va descubriendo al lector los años de crecimiento y descubrimiento de unos jóvenes que hoy son adultos. Un retrato vital y social que también se acompaña de referencias a letras de canciones bien conocidas de las décadas por las que transita la publicación, canciones que Apraiz ha reunido también para proponer a los lectores un listado de temas en Spotify que escuchar, por ejemplo, mientras se lee.
Si hubieras bailado para mí, de todas formas, no es el debut de la escritora. Le precede otro título que de momento sigue esperando. “El primer libro lo empecé el 1 de enero de 2016 con la intención sólo de enredar. Casi era como quien se pone a cantar un día en la ducha y luego se va complicando. Como soy de o todo o nada, no paré hasta terminar. Mandé la historia a las editoriales y como sabía que iba a tener que esperar un tiempo, inicié otro libro, que es éste. Eso sí, no sólo no he descartado esa novela sino que tengo otros dos proyectos sobre la mesa”.
Así lo describe la también arquitecta, quien defiende que “no estás hablando de profesiones tan distintas. Los arquitectos también contamos historias”. Además, “tal y como está la arquitectura, tenemos bastante tiempo libre”, dice con una sonrisa.