Vitoria - Justo acaba de abandonar Gasteiz para iniciar unas jornadas frenéticas por tierras francesas. Mañana estará en el Ateneo Republicano del Limousin (Limoges). El miércoles y el jueves acudirá al congreso internacional Guerre civile espagnole et BD (Angulema). Y el viernes y el sábado acudirá a dos festivales a celebrar en Cognac y Colomiers. “Ahora estoy moviéndome y trabajando mucho más que cuando era clase activa. Me jubilé en cuanto cumplí los 60 porque llevaba ya 38 años de cotización y no paro”, ríe Antonio Altarriba.
En la maleta lleva también una novedad que tiene siete años y que hace seis le reportó el Premio Nacional del Cómic. “Éste es un caso muy insólito de libro porque a pesar del paso del tiempo El arte de volar sigue muy vivo. Todavía no puedo hablar de él en pasado”, explica el autor sobre esta novela negra basada en la vida y muerte de su padre, y realizada junto a Kim.
El libro está teniendo además un recorrido internacional que no se detiene. Acaba de salir a la venta en Serbia, sumándose así a una lista de 13 países en los que también se está encontrando con los lectores. “Llevo siete años viviéndolo como si fuera presente”, una sensación que, por ejemplo, esta semana va a volver a tener en el marco del citado congreso de Angulema, ciudad hermanada con Vitoria. Allí se va a hablar sobre la Guerra Civil española y su presencia en el cómic dentro de los actos que en el país vecino se vienen realizando con motivo del 80 aniversario del golpe de Estado del bando nacional. “Los franceses están haciendo algo que nosotros en este país no, que es volver a la memoria histórica. Se hacen seminarios, conferencias, ciclos... mientras aquí estamos amordazados en este tema también por las políticas del Partido Popular”, denuncia.
Eso sí, en el mercado español El arte de volar acaba de publicarse otra vez, eso sí, en esta ocasión por Norma Editorial y con una ampliación con respecto al original. “No es que quiera que los lectores se gasten de nuevo el dinero en lo que ya tienen, sólo que hay muchas razones para hacerlo así”. La principal, los problemas con la editorial original, De Ponent.
“Antes del fallecimiento de Paco Camarasa, ya tenía muchos problemas con ellos porque no me pagaban derechos. Después de su muerte, todo ha ido a peor. Tienen los derechos mundiales de un libro que ya ha salido en 13 países. Así que todos los ingresos que vienen de las ventas en 2015 de esos lugares, no los he cobrado. Y como yo, están muchos otros autores”. Mientras el proceso legal que están llevando los abogados sigue, lo cierto es que los derechos para España quedaron libres el pasado marzo, lo que ha llevado a Altarriba y Kim a llevar a cabo esta reedición ampliada con Norma, responsable este año de la publicación de El ala rota, el libro que el escritor y guionista ha basado en la vida de su madre.
En cuanto a este último título, su senda también está siendo internacional. Por el momento, Portugal, Francia y Alemania ya conocen sus páginas. “Son dos libros autónomos” recuerda Altarriba, aunque sabe que Norma está pensando, con las navidades en el horizonte, publicar una caja especial con ambas referencias. “Claro que mis padres se separaron al final y esto de rejuntarlos ahora no sé, no sé”, ríe. - DNA