Vitoria - Con Puagg!! empezaron a dar los primeros pasos. Una cena un tanto fatigosa llevó a Eneko Etxegarai a inventarse un cuento para su hijo que terminó convirtiéndose en un libro junto a las ilustraciones de Eduardo Rodríguez. Cuando los lectores de cualquier edad se estaban encontrando con aquella primera referencia, ellos ya tenían entre manos dos nuevos proyectos. Así que tras el estreno de 2013, al año siguiente llegó Liur, el zorro, que dio el relevo en 2015 a Ez dut txerrikume izan nahi. Como tampoco es bueno perder o cambiar las buenas costumbres, ambos no podían dejar pasar este 2016 sin una cuarta publicación. “No paramos”, ríen, mientras hablan de que ya están trabajando en... Pero mejor no perderse en lo que ya vendrá en el futuro. Quien reclama ahora su atención, y la del público, es El secreto de la oscuridad/Ilunpearen sekretua (Denonartean-Cénlit).
Aunque será el próximo 26 en Elkar San Prudencio cuando Etxegarai y Rodríguez harán una de sus siempre interactivas presentaciones a los lectores, el libro (tanto en euskera como en castellano) ya se encuentra disponible, una oportunidad para adentrarse en una situación que casi cualquier niño o niña conoce. Al fin y al cabo, cuando la luz se apaga y es el momento de dormir, todo es posible, también para lo malo. “En casa, el enano tenía pesadillas y no había forma de volver a dormirle cuando se despertaba así. En un bar, que es donde casi siempre se solucionan las cosas, alguien me comentó que probase a darle la vuelta a la almohada con mi hijo y contarle que así las pesadillas se quedaban encerradas en su mundo sin poder salir”, recuerda Etxegarai. Dicho y hecho. Bueno, y escrito.
Por supuesto, el método sirvió como inspiración para El secreto de la oscuridad/Ilunpearen sekretua, en el que el joven protagonista decide hacer frente a las sombras que a veces se transforman en miedos. “Un día, decide dar la luz y buscar a esos monstruos. Pero no están. Así que trama un plan para descubrir dónde se esconden y una noche se hace el dormido pero está con un ojo abierto”.. y hasta aquí, el resto ya es cuestión de los lectores. “No creemos que sea una temática que pueda asustar, al contrario. Es un cuento ilustrado para cualquier edad”, apunta el escritor.
Con todo Etxegarai pone el foco de atención de manera especial en el trabajo que ha realizado Rodríguez. “Siempre hay temas que te dan más juego y el de los monstruos es uno de ellos”, reconoce el ilustrador. De hecho, todas las imágenes creadas “son como cuadros”, piezas (sumando los bocetos) con las que, de cara a 2017, se quiere hacer una exposición independiente para mostrar los procesos de elaboración. De hecho, el peso específico de los dibujos ha llevado esta vez a cambiar el formato de la publicación de forma que los dos elementos que la componen se complementen pero sin mezclarse.
Con la confianza de la editorial, que les dio carta blanca a la hora de afrontar un tema que a buen seguro genera más problemas entre algunos adultos que entre los propios pequeños, su cuarta propuesta apela a “cualquier niño o niña, puesto que todos y todas podrían ser el protagonista del libro”. - DNA