Madrid - La diseñadora de vestuario Yvonne Blake (Manchester, 1938), fue elegida ayer presidenta de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas tras la dimisión de Antonio Resines. Blake prometió menos “caciquismo” y más “transparencia” y “renovación” en su mandato para los próximos tres años. “Uno de los problemas que teníamos con la anterior presidencia era la falta de transparencia, han tomado decisiones sin consultar con la junta, que debe tener siempre la última palabra”, subrayó Blake en una rueda de prensa tras ser elegida con 193 votos a favor, 50 en contra, 3 votos en blanco y dos nulos.

El recuento final de votos incluye el efectuado por correo ordinario, internet -por primera vez- y el presencial de esta mañana. Las urnas estuvieron abiertas entre las 11.00 y las 13.30 horas en la sede de la Academia. El resultado fue recibido con aplausos en el auditorio, donde la nueva presidenta afirmó ante los académicos que esta institución será “la casa de todas las personas que hacen cine”.

La ganadora de cuatro premios Goya y un Oscar formará una terna presidencial con el director de cine Mariano Barroso y la actriz Nora Navas en las vicepresidencias primera y segunda, respectivamente.

Era la única candidatura en competición, aunque Blake aseguró que no se han sentido solos. “Hemos recibido muchas muestras de apoyo, desde dentro y desde fuera”, señaló. Ese apoyo no se traduce necesariamente en participación, ya que de los casi 1.200 académicos que forman parte de la asamblea general sólo han votado 248. “Vota muy poca gente, es la tónica de las últimas elecciones y es uno de los principales puntos a confrontar, la participación”, afirmó Barroso, que habló de un “divorcio entre la Academia y la gente que hace cine”. “Es un clamor, en la Academia no está la gente que está haciendo el cine del presente y el futuro”, subrayó el director de “Los lobos de Washington” ante la discrepancia de la directora Azucena Rodríguez, miembro de la junta directiva que ha participado en la rueda de prensa.

Premios goya En relación con la próxima edición de los Premios Goya, Blake apuntó que será una gala “algo más sobria”, porque el presupuesto del que disponen es menor. “Queremos hacer algo más fresco y diferente”, declaró. Después explicó que ese recorte de presupuesto tiene que ver con “extravagancias” de la anterior presidencia, y en concreto mencionó los gastos legales derivados de la puesta en marcha de la Fundación Academia de Cine, un proyecto de Resines de carácter educativo y asistencial. “Se cambiaron cosas sin consultar con la junta y hemos pagado mucho dinero. Ahora tendremos más cuidado con lo que gastamos, no queremos derrochar, pero eso no va a afectar al resultado de la gala, va a ser igual de bonita”.

Blake, establecida en España desde hace casi cinco décadas, asumió la presidencia interina de la Academia tras la dimisión de Resines a mediados de julio pasado, poco más de un año después de haber sido elegido, por “serias discrepancias” con la junta directiva. - Efe