A veces hay demasiada luz, un exceso que no permite ver más allá, que oculta aquello que permanece en la oscuridad, algo que en ocasiones sucede de manera intencionada. Por eso, cuando el sol desaparece, los ojos de los componentes de Azken Aukera se abren bien para mirar más allá, para no dejarse atrapar, para decir lo que piensan y lo que sienten. Así lo han querido hacer en Eguzkia ezkutatzean, un primer disco que acaban de publicar en mayo.
Tras una maqueta editada el año pasado, el cuarteto gasteiztarra afronta ahora un nuevo reto que ya está disponible tanto en su versión digital (se puede conseguir de manera gratuita en Bandcamp) como física (los CD están a la venta en los conciertos de la banda). “El anterior trabajo lo grabamos en el local de una manera un poco simple y ahora queríamos dar un paso adelante con el objetivo de hacer algo más profesional, aparte de conocer lo que supone pasar por un estudio, que era algo que ninguno había hecho”, explica Jon Pérez de Heredia, que comparte camino musical con Unai Beristain, Iñaki Estankona y Aitor Pujana. Las recomendaciones de unos y otros les llevaron a dar con Itxura Estudioak, ese proyecto impulsado por Fonta (Frenetik) y Fran Pérez desde Alsasua por el que tantos grupos alaveses están pasando. “Ha sido una experiencia muy importante, un proceso bonito, y eso que al principio pensábamos que iba a ser todo muy complicado, que no lo íbamos a poder hacer en un mes, que nos iba a ser imposible trabajar con el metrónomo... pero al final ha sido todo lo contrario”.
El resultado son canciones como Ezin dut ihes egin, Musika o Armak, sin olvidar temas en los que han contado con colaboraciones, como Hesian -en la que interviene Unai Olalde (Eratu)- e Ipuin ilunak -con Xabi Bandini (Kerobia)-, a lo que hay que sumar que en varias partes del disco también están presentes las voces de Javi y Endika de Psikotropik. “Nos gustaría que la gente, al escucharlo, perciba que detrás del disco hay un trabajo duro. Es rock, sí, pero además de momentos duros también tiene instantes melódicos”. Esos sonidos sirven como vehículo, sobre todo, a la crítica “ante las situaciones que nos rodean, ante aquello que nos parece injusto”.
Hace unas semanas, la presentación oficial en directo se produjo en la sede de Orbain, un lugar “para sentirse muy a gusto, donde la gente está muy cerca y lo notas porque conectas rápido; se generó una atmósfera especial”. Poco después, eso sí, el contexto cambió de manera casi total puesto que los gasteiztarras estuvieron tocando en el Ibilaldia celebrado en Durango. “Disfrutamos como niños porque estar allí fue una oportunidad única”. Eso sí, la agenda no se puede parar. La banda está cerrando los próximos conciertos tanto en tierras alavesas como fuera.