Los Ángeles - Jodie Foster forma parte de la realeza de Hollywood, pero tras una carrera repleta de éxitos, prefiere centrarse en su labor tras las cámaras y ayudar a derribar una gran barrera: “El sistema aún considera que una mujer directora es un riesgo”, dijo en una entrevista.

Foster (Los Ángeles, 1962) tuvo ocasión de dirigir su primera película (El pequeño Tate) a los 29 años. Sin embargo, esa oportunidad no es frecuente entre las mujeres en Hollywood y la doble ganadora del Óscar a la mejor actriz por Acusados (1988) y El silencio de los corderos (1991) tiene claro el motivo.

“Son muchos años ya así, especialmente en películas con grandes presupuestos. Y eso ocurre porque las películas de ese tipo sienten aversión por los riesgos. De alguna manera, no sé el motivo aún, el sistema considera todavía que una mujer directora es un riesgo y en esas cintas se tiende a minimizarlos”, valoró la cineasta.

evolución “No obstante”, reconoció la actriz de 53 años de edad, “eso está cambiando”. “Es cierto que hay más ejecutivas en Hollywood y que la situación sigue igual. Pero tengo claro que la cultura está cambiando y que todos queremos más diversidad tanto dentro como fuera de la pantalla”, declaró Foster, que en su carrera ha rodado más de cincuenta largometrajes y solo uno fue dirigido por una mujer: Siesta (1987), de Mary Lambert.

Foster, que lleva actuando desde los tres años, estrena el próximo viernes en EEUU Money monster, su cuarta película como directora, un cruce entre Network y Día de perros, donde cuenta con un reparto liderado por George Clooney y Julia Roberts.

En realidad, dirigir siempre fue su sueño, y ahora que no abundan los papeles de calidad para actrices de su edad y que sus dos hijos (Charles y Kit) son adolescentes, cree que es el momento adecuado para volcarse en esa faceta.

Pero eso no quiere decir que vaya a renunciar a su trabajo como actriz. Ni mucho menos. “Hay momentos en los que te quemas; he tenido muchos durante mi carrera y los seguiré teniendo”, confesó Foster, casada desde 2014 con la fotógrafa Alexandra Hedison.

“No solo porque actuar agota, sino por el tipo de vida que conlleva, repleta de viajes. Luego desconectas un año y deseas volver a hacerlo. Así que nunca dejaré de actuar. Estoy deseando ver qué papeles hago con 60 o 70 años, siendo la abuelita quejica. Sobre todo deseo no estar en las portadas de las revistas”, manifestó. “Pero”, insistió, “ahora quiero centrarme en la dirección”.

drama y comedia Money monster funciona como un drama con elementos de suspense y tintes de comedia donde Lee Gates (Clooney), un presentador de televisión convertido en el rey de las finanzas por sus comentarios sobre Wall Street, es secuestrado en directo por un hombre (Jack O’Connell) que ha perdido todos sus ahorros tras seguir uno de sus consejos. Gates, con la ayuda de su productora (Julia Roberts), luchará por seguir con vida mientras trata de desentrañar un enorme fraude que apunta a una de las grandes entidades del mercado financiero.

Foster ha bebido de las mejores fuentes posibles a la hora de modular sus pasos como realizadora. En su trayectoria como actriz ha trabajado con Martin Scorsese, Jonathan Demme, Robert Zemeckis o David Fincher. “Esa fue la mejor escuela de cine posible”, admitió. “Es de lo que más agradecida estoy en mi carrera. Haber estado en la misma sala que ellos; observar, aprender, charlar... Todo eso me ha ayudado a encontrar mi propia voz como autora y a saber tratar a los actores”, aseguró. - Efe