USURBIL. Desde una bucólica atalaya ubicada en un monte de Usurbil, donde se esconden los estudios Higain, el lugar en el que prepara estos días la gira europea de PIL, "Juanito el Podrido", ha ofrecido hoy una anárquica rueda de prensa en la que, entre bromas, poses, cigarrillos e incluso algún eructo al micrófono, ha expuesto su particular filosofía de vida.

Su principal base, el humor, que, según ha confesado, ha impulsado su carrera mucho más que la ira y le ha llevado a "no tomarse en serio a sí mismo", un afán al que ha dedicado toda su comparecencia.

Ha hablado acompañado a su derecha por su fiel y silencioso manager, "Rambo", y por dos traductores, el primero al euskera, y la segunda, al castellano.

Ha asegurado que tuvo la oportunidad de haberse hecho rico como una "estrella de rock", pero prefirió huir de "la ridícula caricatura que era Johnny Rotten" y optar por una "vida libre y de verdad". Por eso dejó los Pistols y fundó PIL, porque dice que no le gusta "la comodidad". "Siempre he tenido que luchar por mi vida, por mi independencia, y así seguiré", ha asegurado Lydon.

El cantante, de 60 años, ha recordado su infancia, cuando una meningitis le produjo una amnesia de cuatro años, y ha asegurado que el humor británico, con toques irlandeses, le ayudó a salir adelante. Por eso ha insistido en "no tomarse en serio a sí mismo", porque "ayuda a corregir los propios fallos", un esfuerzo "imposible" para los "políticos e intelectuales".

Hace algunos años fijó su residencia en Los Ángeles, un lugar en el que "no hay tiempo", ya que la meteorología "no cambia", lo cual beneficia a su delicada salud, según ha indicado, ya que padece habitualmente bronquitis y neumonías.

Tras esta confesión, Lydon ha sacado un paquete de tabaco y ha encendido un cigarrillo: "No penséis que soy un santo, pero tampoco soy un pecador", se ha justificado.

Las próximas serán las primeras elecciones estadounidenses en las que podrá ejercer su derecho al voto y seguramente tendrá que elegir entre "Donald -soy-el-primer-hombre-de-negocios-que-no-miente- Trump" y Hillary Clinton, "una política profesional". "Por favor, ¡ayudadme!", ha bromeado.

"Donald Trump está comprando la Presidencia", ha denunciado Lydon, quien ha asegurado que al magnate le bastarán "seis semanas" para hacer "todas las tonterías que quiere hacer", entre ellas, construir un muro en la frontera con México.

Lydon se ha declarado amante de la naturaleza y seguidor de Gandhi. Entre broma y broma se ha puesto serio para asegurar que "si un hombre mata a otro por una causa política, no tiene causa", algo que también ha hecho, según el músico británico, la religión, porque "la religión primero es política".

Ha hablado asimismo de la música, de lo poco que le importan las listas de éxitos, aunque agradece cuando le llega "el cheque" que, irremisiblemente, suele venir acompañado de "muchas facturas".

"A veces es una sorpresa agradable aparecer en esas listas sin pretenderlo", ha añadido, para apuntar a renglón seguido que con PIL ha tenido muchos éxitos que han llegado a las listas.

Preguntado por la música y la actitud de otro referente del post-punk como Mark E. Smith y The Fall, Johnny Rotten se ha sonreído y ha espetado que "ha hecho el mismo disco una y otra vez, suerte para él".

El miércoles arranca su gira europea en Donostia, con canciones de sus últimos trabajos "This is PIL" y "What de World Needs Now", pero también con una "perspectiva histórica".

Este mes Lydon y su actual formación ofrecerán conciertos en Valencia (6 de mayo), Santander (7 de mayo) y Madrid (8 de mayo), antes de partir hacia Alemania, Eslovaquia, Polonia y Ucrania.

Respecto a si queda algo del espíritu punk hoy en día, lo tiene claro: él mismo. "Soy el rey de los punks y nadie me arrebatará la corona. Me la he ganado con mucho trabajo".