madrid - La actriz Penélope Cruz acudió el jueves por la noche al programa televisivo de Graham Norton, a raíz de la promoción en Inglaterra y el estreno de la película Zoolander. En el espacio, la viajada intérprete madrileña desveló sus problemas con el inglés cuando llegó a Hollywood. Hasta producirse situaciones embarazosas, o divertidas, según el punto de vista...

Penélope, que acudió al plató con sus compañeros de reparto, Ben Stiller y Owen Wilson, confesó sus deslices con el idioma cuando empezaba a abrirse camino en la meca del cine. “Cuando llegué por primera vez hablaba tan poco, básicamente solo sabía unas cuantas líneas. Me preocupaba porque no sabía lo que los actores y el director estaban diciendo, era muy frustrante”. La actriz, que se encontraba muy cómoda, se atrevió a contar alguna anécdota: “Incluso me avergoncé de mí misma en la peluquería cuando en lugar de un alisado (blow dry) le pedí al estilista una felación (blow job)”, relató entre risas.

Todo aquello quedó atrás y la estrella cinematográfica española es ahora una de las más demandadas en el mundo del espectáculo. “Es una persona hermosa y una actriz increíble, solo quería aparecer con ella”, decía Ben Stiller, coprotagonista y guionista de la comedia junto a Owen Wilson, ambos presentes también en el show de la cadena BBC One.

De hecho, la musa de Almodóvar se ha afanado en aprender tan bien el idioma de Shakespeare que en la web hablamejoringles.com aprecian que “aparte de algunos pequeños errores, Penélope Cruz usa unas palabras y unos giros que dejan claro que se ha currado bastante su inglés”, evitando “los vicios típicos de los hispanohablantes”. “El hecho de que cambie tan fácilmente entre verbos con y sin s (tercera persona) demuestra que ha interiorizado el uso correcto de la s”, repasan en referencia a una entrevista que tuvo lugar hace bastantes años.

Según recuerda Chance, Pe encarna en Zoolander a Valentina, una agente de la Interpol que busca la ayuda de los dos protagonistas para una misión. “Yo era muy fan de la primera película. La había visto seis o siete veces y era una de esas personas que memorizan el diálogo, así que cuando me llamó Ben estaba feliz porque iba a ver una segunda parte e iba a estar en ella”, añadió la esposa de Javier Bardem.

Al principio, Pe memorizaba los textos mientras hablaba en castellano en casa. España es uno de los países de la UE que peor se maneja el inglés.