Pekín - Los chinos ya pueden contar con un escritor en euskera en sus estanterías, el premio Nacional de Literatura Kirmen Uribe, que ha desembarcado en China con Lo que mueve el mundo (Mussche, en su edición en lengua vasca), su relato sobre los héroes anónimos del día a día.

Tras haber sido traducido a más de una decena de idiomas, Uribe ha logrado ver una de sus obras en mandarín, el “colofón” a la trayectoria internacional de este joven autor, según destacaba ayer en Pekín el director de la plataforma literaria Sinicus, David López-Del Amo.

Uribe (Ondarroa, Bizkaia, 1970) presentó ayer en la Universidad Normal de Pekín su primera obra traducida al chino con un debate de alto nivel, acompañado del escritor local Su Tong, autor de La linterna roja, llevada al cine por el premiado director Zhang Yimou, en una actividad organizada por Acción Cultural Española, Etxepare y Sinicus. “Para mí es una gran alegría”, comentó el escritor tras su contacto con el público chino, que ha reído con sus bromas y se ha interesado por sus historias, las de sus libros y las de su propia vida.

Uribe se entregó a una sala llena de periodistas locales y universitarios, a los que ha desvelado el pasado marinero de su familia y a los que ha hablado de la España de la Guerra Civil, de los niños que huyeron de Gernika y de esos héroes anónimos del día a día, como Robert Mussche, el escritor belga que acogió a una de esas niñas que escaparon y en el que basa el libro que ha sido traducido al chino. “Es un libro no muy grande pero con mucho peso”, destacó Zhang Qinghua, director del Centro Internacional de Escritura Creativa de la Universidad Normal, poco antes de dar paso a Uribe y a Sun, un autor que, como recordó el director, “siempre ha sido el protagonista”.

Bajo el tema Cómo escribir la historia olvidada a propósito, ambos autores, chino y vasco, acercaron posturas y llevaron la charla hacia viejas heridas, como la invasión nipona en China que sus ciudadanos aún tienen muy presente o los bombardeos en Bizkaia. “Todos los escritores que se niegan a escribir ficción les interesa la parte olvidada, la parte oculta, la que se ha hundido en el fondo del mar... Los escritores de la no ficción son buceadores en busca de esa verdad”, señaló Sun, quien dedicó los dos días previos a acabarse la novela del galardonado autor vasco.

Sun valoró que su compañero de profesión dedicara un libro a esas “personas que están escribiendo la historia de la Humanidad”. “En esta novela, se evidencia la tendencia del señor Uribe, su atención a los héroes normales y corrientes. Ellos, como dice el título del libro, son los que están moviendo el mundo”, remarcó.

De China a Japón Uribe, que tras su parada en Pekín viajará a Japón para seguir promocionando su libro -esta vez, en japonés-, se mostró esperanzado en que su obra guste en el país asiático, a pesar de que en la charla ya ha destripado los detalles del libro, incluido el final. “En las novelas lo importante no es la historia, sino cómo se cuenta”, argumentó entre risas frente al público, de quien se despidió recitando una poesía en euskera.

Para Uribe, este viaje cierra un círculo, que empezó cuando él tenía unos 11 años y en Navidad, a diferencia de sus amigos, pidió que le regalaran una enciclopedia Larousse para conocer más sobre la cultura china, de cuya literatura hoy es seguidor. “Creo que van a recibir bien mi historia. Los lectores me dicen que emociona y al final las emociones son universales. Todos sentimos igual”, dijo el joven autor tras remarcar su vínculo con el país: “Eso se ve tanto en la literatura tradicional china como en la que hago. Lo que me han dado ellos, ahora se lo doy yo”.