Barcelona - La compañía Vol-Ras, pionera del teatro gestual en España, ofrecerá dos actuaciones en el Teatro Poliorama de Barcelona los próximos días 14 y 15 de diciembre, con las que se despedirá de los escenarios tras 35 años sobre las tablas.

Los dos integrantes de Vol-Ras, Joan Segalés y Joan Faneca, están ensayando estos días un nuevo número que incluirán en su obra Da Capo y con el que dirán adiós a sus seguidores. En este número abren un baúl y extraen objetos utilizados en antiguos espectáculos de la compañía para “hacer un pequeño viaje a través de las obras” que han creado en las últimas décadas y “dar algún flash” a la gente que les ha seguido durante estos años, según explicaron ayer.

Las cerca de 300 personas que han colaborado con la compañía a lo largo de los años estarán invitadas a la primera de las dos funciones, que Segalés y Faneca esperan que sea una celebración “llena de alegría”, porque están “muy contentos” con lo que les ha pasado durante todo este tiempo. “Aunque es posible que nos caiga alguna lagrimita”, reconoció Joan Segalés, el más hablador de esta pareja de mimos que ha creado 19 espectáculos y representado más de 3.000 funciones en teatros de todo el mundo.

Vol-Ras anunció su disolución en abril, cuando ya tenían en marcha su actual espectáculo, Da Capo, que lleva varios meses de gira y todavía seguirá rodando hasta el próximo febrero. Da Capo transcurre en la parte de atrás de un escenario donde tiene lugar una representación teatral que acaba con la destrucción de toda la estructura que soporta la obra. La idea de la obra son “las estructuras que se desmontan”, en un momento en el que “ésa es la sensación” que tienen los dos actores, especialmente en lo que al sector cultural se refiere.

De todas maneras, cuando crearon la obra los autores todavía tenían esperanzas, por lo que decidieron llamarla Da Capo, que es un termino musical que significa “desde la cabeza” e indica que hay que volver a empezar desde el principio. “Vimos que teníamos que volver a empezar desde el principio, pero finalmente hemos desistido”, sentenció Segalés.

En su opinión, la sociedad actual “no valora la experiencia” y “aunque hay mucha”, opta por despreciarla, dejar que se pierda, “olvidarla” y “no transmitirla a las nuevas generaciones”. A pesar de esta tendencia, los miembros de Vol-Ras están dispuestos a transmitir su experiencia a todo el que quiera recibirla y, aunque se disuelven como compañía, no se jubilan y tienen varios proyectos en cartera.

Lo que tienen claro es que no quieren continuar como compañía porque la crisis “ha reducido drásticamente las contrataciones” y “el apoyo institucional”. La gota que colmó el vaso fue la noticia de que habían perdido la subvención que la Generalitat les otorgaba desde hacía nueve años. “Este año han aumentado las ayudas a las salas y han reducido las ayudas a las compañías. Parece claro que prefieren ayudar a la tienda que al creador”, denunció Segalés. - Efe