GRANADA. El ganador de la edición 2012 del reality show 'Gran Hermano', el bailaor Pepe Flores, que recientemente ha sido condenado por el Juzgado de lo Penal 3 de Granada a un año de prisión por presuntamente intentar atentar contra una enfermera del Hospital Clínico de Granada ha negado los hechos que se le atribuyen y ha achacado la denuncia al "afán de protagonismo mediático" de la sanitaria.

Asimismo, en un comunicado remitido a Europa Press, Flores ha recordado que la sentencia no es firme, y está recurrida en apelación ante la Audiencia Provincial de Granada, porque recoge como válida la versión ofrecida sobre los hechos por parte de la enfermera, versión "en modo alguno" asumida por él ya que "dista mucho de la realidad".

De hecho, ha explicado que el día 10 de junio de 2013, sobre las 17,00 horas, él acompañaba a su madre, quien se encontraba hospitalizada y paseando por el pasillo de la planta en la que estaba ingresada, cuando, en un momento dado, la enfermera, que ya conocía a Flores "por anteriores ingresos de su madre" se dirigió a él "en tono elevado y altivo diciéndole": "¿qué pasa, que miras chulo?".

Según la versión ofrecida por Flores, él no hizo caso a esas "provocaciones" y continuó con su madre, pero la enfermera insistió y le preguntó: "¿Chulo, te has gastado ya el dinero en coca? Das asco tú y tu mundo de delincuencia, mañana vas a salir en la prensa".

Tras aquella manifestación, Flores afirma que procedió a decir a la enfermera que respetara por favor su situación, ya que su madre se encontraba enferma, y le recriminó que tuviera un comportamiento "poco profesional". Acto seguido, según el acusado, la enfermera se dirigió a la madre de Flores, quien se encontraba en su habitación, diciéndole: "su hijo me ha insultado, no ha tenido un comportamiento correcto, tiene un hijo que es un sinvergüenza señora".

"No contenta con dicha actuación", la enfermera, al salir de la habitación que ocupaba la madre de José Flores, expresó en voz alta ante las personas que allí se encontraban, "faltando a la verdad": "me ha dicho que le chupe la polla!", expresión que fue "irónicamente" contestada por él con la expresión: "ya te gustaría a ti".

Ante tal expresión, la sanitaria volvió a decir al bailaor: "chulo, chulo, vas a salir en la prensa, voy a llamar a la Policía, voy a llamar a la Policía, esto mañana sale en prensa", saliendo de la habitación de la madre, y golpeando a José Flores en el brazo, "aunque sin causarle ninguna grave lesión".

Tras lo ocurrido, la enfermera se aseguró de que su versión de los hechos, "faltando gravemente a la verdad", se hiciera pública en los medios de comunicación, con el objetivo, según sostiene el procesado, "de perjudicar gravemente" su reputación" e intentar generarse "una publicidad que le reportara repercusión social y beneficios económicos como consecuencia del eco mediático que la noticia tendría".

Así, según asegura Flores, el 14 de junio de 2013 la enfermera envió un mensaje a un conocido tertuliano de programas de televisión, para dar la mayor difusión posible a su versión de lo ocurrido, "hecho que ha vuelto a consumar tras el dictado de la sentencia del Juzgado de lo Penal 3 de Granada como primera instancia del procedimiento".

"A esta situación se ha llegado sin duda alguna por el afán de protagonismo público y mediático de la enfermera", mantiene Flores, que afirma que consta en su historial patologías psicológicas anteriores. "Me parece vergonzoso que se me utilice a mí con tal de salir en televisión", ha señalado Flores en declaraciones a Europa Press.

LA SENTENCIA RECURRIDA

Según consta en la sentencia recurrida, los hechos comenzaron cuando la funcionaria se encontraba preparando la medicación, momento en que supuestamente el acusado, que paseaba con su madre por el pasillo, se le acercó diciéndole "qué pasa guapa", pero la mujer siguió con su trabajo.

No obstante, cuando volvieron a coincidir en el pasillo, Flores ya le dijo a la funcionaria "esta tarde me comes la polla" y le instó a que se metieran en un cuarto. Luego, al encontrarse cerca del office, le amenazó afirmando "te vas a enterar cuando salgas".

Según se señala en la resolución del Penal 3, también le advirtió de que la iba esperar fuera y le iba a destrozar la cara, y le llegó a agarrar del hombro para acercarla pero, al zafarse ella, el inculpado intentó morderle en la mano.

Tras estos hechos la enfermera llamó al supervisor de guardia, a la Policía y a los vigilantes de seguridad, que se personaron y acompañaron a Flores hasta la salida del hospital.

A consecuencia de lo ocurrido, según el juez, la mujer tuvo una reagudización de un cuadro psicológico depresivo precedente que origina, entre otros rasgos, una búsqueda activa de evitación de conflictos y problemas. Sufre asimismo un estado emocional caracterizado por tristeza, indefensión, estado de alerta y disminución de su percepción de control, y percepción de amenaza a su integridad física.

Flores acusó a la enfermera de una falta de injurias y otra de maltrato de obra, pero el juez ha considerado que no está acreditado que lo insultara, golpeara o empujara, con lo que absuelve a la mujer de estos cargos.

La Fiscalía pedía inicialmente para él una pena de un año y nueve meses de prisión y una multa por un delito de atentado a agentes de autoridad y una falta de maltrato de obra.

No obstante, el magistrado Antonio Aguilera le absuelve de la falta pero le condena por el delito de atentado, a un año de prisión, además de al pago de la mitad de las costas procesales y de una indemnización de 1.000 euros por daño moral a la víctima.