madrid - El Museo Nacional del Prado albergará desde hoy una decena de obras de Pablo Picasso procedentes del Kunstmuseum Basel, en lo que supondrá un homenaje al pintor malagueño para que se sienta “como Pablo por su casa”, según bromeó el director de la pinacoteca, Miguel Zugaza. Esta exposición se completa con otra simultánea en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, que también albergará un total de 166 obras del museo suizo, entre ellas la más cara del mundo (Nafea Faa Ipoipo, de Paul Gauguin).

Ambos museos vestirán sus salas hasta el 14 de septiembre con algunas de las obras más importantes que atesora el Kunstmuseum de Basilea, uno de los centros de arte más relevantes del mundo que cerró sus puertas el pasado mes de enero para iniciar obras de rehabilitación, remodelación y ampliación del edificio.

En el caso del Prado, se incluirán diez obras de Picasso (fechadas entre 1906 y 1967), de las cuales ocho se exponen por primera vez en el Estado. “Hay que alabar el esfuerzo coleccionista del Kunstmuseum, pero también sirve de ligero reproche a los españoles porque no podemos mostrar el mismo credencial ante el artista más importante del siglo XX”, señaló Zugaza, quien apuntó que las obras de Picasso estarán ubicadas en un lugar “solemne”, la Galería Central del Prado, y que el pintor podrá así “dialogar” con otros grandes maestros como Rubens o Tiziano.

“Recibimos a estos Picassos por la puerta grande, se presenta como una ofrenda artística. El pintor malagueño vuelve a pasear por el Prado con una naturalidad pasmosa y se podría decir que se sentirá como Pablo por su casa”, indicó. De esta manera aludió a la estrecha relación del artista con esta pinacoteca, de la que fue director “simbólico” durante la Guerra Civil: “Él ya dijo que fue nombrado por la Republica y por tanto nunca llegó la carta de cese, por lo que se sintió responsable del Museo hasta el final de su vida, en un gesto más de carácter político que de otra cosa”.

166 obras en el reina sofía En el caso de la exposición del Reina Sofía, la muestra acoge un total de 166 obras de maestros de los siglos XIX y XX en dos muestras: Fuego blanco. La colección moderna del Kunstmuseum Basel y Coleccionismo y Modernidad. Dos casos de estudio: Colecciones Im Obersteg y Rudolf Staechelin. El director del Reina, Manuel Borja-Villel, alabó la “cantidad y calidad” de nombres que participarán en la muestra, lo que la hace casi “inabarcable”, con artistas como Edvar Munch, Vasili Kandinski, Pablo Picasso, Juan Gris, Georges Braque, Le Corbusier, Fernand Léger, Hans Arp, Yves Tanguy, Max Ernst, Paul Klee, Piet Mondrian, Mark Rothko o Steve McQueen en la primera exposición, y piezas de Gauguin, Van Gogh, Renoir, Picasso, Chagall o Cézanne en la segunda.

Precisamente, en esta última se espera para los primeros días de julio la llegada del cuadro más caro de la historia, Nafea Faa Ipoipo de Gauguin --adquirido por 265 millones de euros (cerca de 300 millones de dólares) por la Autoridad de Museos de Qatar (Doha)-, que representa a dos jóvenes de Tahití y fue realizado en 1982. - E.P.