Hasta mañana su plan de trabajo no encuentra tiempos libres. Desde el domingo, Artificial está tomando cuerpo de la mano de la treintena de personas que componen el equipo artístico y técnico que se encuentra bajo las órdenes del realizador David P. Sañudo. Eso sí, podrían haber sido muchísimas más, puesto que más de 300 se han puesto en contacto con la productora alavesa Amania Films para ser figurante en el corto. “Nos hemos quedado alucinados con la respuesta y tenemos claro que, aunque no necesitemos a tanta gente, vamos a darles las gracias uno a uno aunque nos lleve tiempo”, describe el productor Luis Espinosa.

Todo para, tras trabajos como Agur y Malas vibraciones, ofrecer al público una historia protagonizada por Gorka Otxoa (que se incorpora hoy al rodaje), un joven que sólo busca un “un trabajo normal, con un sueldo normal”. En ese camino, se cruza ante sí una multinacional. Su cara visible, encarnada por Aitor Mazo (un habitual en los trabajos de Sañudo), propone al joven darle 90.000 euros a cambio, sólo, de dejarse clonar. A partir de ahí... eso es algo que se deberá contar en el futuro a través de la pantalla.

No hay fecha definitiva para el estreno, aunque Espinosa tiene claro que, tras las experiencias anteriores, Amania quiere dar un salto más con Artificial, también en lo que a la distribución se refiere. En este sentido, Malas vibraciones (rodado hace casi un año) ha supuesto una experiencia interesante. “Queremos reservar esta última producción para uno de los festivales importantes; estamos haciendo una planificación muy cuidada para que tenga una determinada repercusión a ese nivel de certámenes”.

El rodaje, de momento, no se detiene. Sea por la noche o por la mañana. Tampoco importa el tiempo. “Afortunadamente, todo lo que hemos hecho hasta ahora es en interiores”, relata con una sonrisa el productor. Delante y detrás de las cámaras repiten muchos nombres que han colaborado en los dos cortos antes mencionados, puesto que “cuando ves que conectas, que trabajas a gusto con la gente, tener la ocasión de repetir hace las cosas más fáciles”.

En este camino, Amania Films también ha encontrado la colaboración de las firmas alavesas Sonora Studios y DCP Cine, así como el apoyo de empresas de distintos sectores como Aboaser, A&B Laboratorios (donde ayer a primera hora de la tarde se estaban rodando varias escenas con Mazo), Servicex o el Asador 10. Granos que sumar para que sea real Artificial.