Cada uno disfruta de su tiempo libre como puede o le dejan, pero es indudable que en los tiempos que corren, gran parte de ese ocio llega a través de una pantalla, sea grande o pequeña. A lo largo de los últimos años, el multifacético artista gasteiztarra Mauro Entrialgo ha ido publicando en distintos medios historietas sobre esos momentos de distensión frente a la televisión, el cine o los videojuegos, miradas desde el humor que ahora se han convertido en libro.
El pasado día 21 vio la luz, de la mano de Diábolo Ediciones, Atentos a sus pantallas, dividido en esos tres vehículos de teórico divertimento. En cada parte, “aunque siempre desde el humor”, explica Entrialgo, “me acerco a esos tres temas de formas muy diversas: hay pasatiempos, reflexiones jocosas, humor gráfico tradicional, historietas breves,... un poco de todo”.
El escritor, dibujante, dramaturgo, músico, realizador... artista incansable, en definitiva, afirma que hoy su agenda diaria pasa por “las dos pantallas ante las que paso más tiempo”, la de su ordenador, por cuestiones laborales, y la de la televisión. En este último caso, uno de los tres sobre los que se estructura el libro, Entrialgo apunta que en su nueva publicación “más que satirizar los contenidos del medio” se reflexiona sobre él: formatos, protocolos, métodos de producción, costumbres de consumo... “Dudo si se puede llamar sátira a este tipo de humor que no se basa en la ridiculización de personas concretas sino, más bien, en la exposición de incongruencias en los hábitos de consumo y en las estructuras mediáticas”, comenta, al tiempo que confiesa que “un día de madrugada en un hotel vi de casualidad un programa americano que consistía en trasladar casas enteras de sitio. Me lo tragué maravillado y creí que había descubierto una rara demencia audiovisual. Después resultó que todo el mundo al que se lo comenté lo conocía”.
En lo que se refiere al cine, el creador afirma que “no creo ni en la distinción de alta y baja cultura ni en la jerarquización per se de las categorías artísticas. El respeto que los medios le tienen al cine deriva de la capacidad de mover dinero, público y fama que tuvo históricamente. Pero ni eso es del todo cierto hoy en día porque hace muchos años que la televisión es la que crea la fama y unos cuantos ya que los videojuegos mueven más dinero. El cine ha creado grandes obras, pero es un medio en claro retroceso de relevancia”. De hecho, “no me produce más respeto un director de cine que un autor de cómics o un compositor”.
De estas y otras cuestiones se habla, desde su inconfundible marca de la casa creativa, sobre unos momentos de supuesta relajación que también tienen su miga. “Gran parte de las mejores obras que he disfrutado últimamente han sido producidas en el tiempo de ocio de sus creadores”, señala Entrialgo.