Valladolid - Los hermanos Luc y Jean Pierre Dardenne levantaron ayer el telón de la 59 edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) con su última película, Dos días, una noche, una historia dramática de actualidad en torno a la solidaridad y a la dignidad humana.

Los cineastas belgas han planteado un drama laboral en el que la protagonista, interpretada por la actriz Marion Cotillard, se ve obligada a convencer a sus compañeros de trabajo en un fin de semana para que renuncien a sus primas y ella pueda así mantener su empleo.

La historia se centra en la lucha a contrarreloj de Sandra, la protagonista, y en su recorrido por los hogares de sus compañeros con el objetivo de que voten por que ella pueda mantenerse en la empresa.

En la rueda de prensa de presentación de la película, Jean Pierre Dardenne explicó que el filme toca un “tema de actualidad” como es la posible pérdida de un empleo durante los años de crisis económica.

fragilidad Desde el primer momento los directores pensaron en que el espectador podría ponerse en el lugar tanto de la protagonista como del resto de los personajes de la cinta.

“Es una película que cuenta que la solidaridad es mejor que la no solidaridad”, expresó Jean Pierre Dardenne, quien destacó que desde el inicio se plantearon el final incluido en la película porque era el “único” compatible con la idea que querían transmitir en el largometraje.

Luc Dardenne aseguró que la historia se centra en un personaje “vulnerable” y ha detallado que el objetivo ha sido que el espectador viera que la película tomaba partido por “los más débiles”, por lo que ha considerado que la cinta podría verse como un “elogio a la fragilidad humana”.

La acogida por parte del público ha sido “calurosa”, según expresó Jean Pierre Dardenne, quien explicó que el relato “es algo a lo que la mayor parte de los ciudadanos son sensibles”.

En cuanto a la crisis económica, un asunto que aparece en el filme, el mayor de los hermanos Dardenne opinó que quizá la crisis ha sido “menos violenta” en Bélgica que en España, aunque en algunas zonas del país la tasa de desempleo es elevada.

Dos días, una noche, que compite en la sección oficial, es el noveno largometraje de los hermanos cineastas, que con su película La promesa (1996) consiguieron la Espiga de Oro del festival de cine vallisoletano.

Los directores belgas consiguieron en la primera proyección de su película los aplausos más tempranos de la Semana Internacional de Cine de Valladolid, que comenzó ayer y se extenderá hasta el próximo 25 de octubre con la exhibición de más de una veintena de filmes en la sección oficial. - Efe