madrid - El escritor valenciano Rafael Chirbes, que obtuvo ayer el Premio Nacional de Narrativa con la multipremiada “En la orilla, señaló que “la culpa del éxito de la novela la tienen los tiempos que corren, más que el libro. Todo coincide con la desolación del país”, ha precisado. “Es una novela difícil, dura, poco grata y poco complaciente -ha argumentado-. Pensé que no iba a gustar, pero las novelas se entienden en su tiempo. Por eso quiero dar las gracias al jurado del premio que la ha valorado, porque sé que es difícil de domesticar”.
La novela galardonada con el Premio Nacional de Narrativa, dotado con 20.000 euros, es el retrato de la España en crisis, un libro que ha gozado también del aplauso de lectores y críticos y, por otro lado, ya ha obtenido el Nacional de la Crítica y el Francisco Umbral, “por su excelencia literaria”. Una novela, en opinión del jurado, “de extraordinaria construcción literaria que, tratando de la realidad actual, no se limita al realismo, mostrando una riqueza formal y unos recursos poéticos que lo trascienden”.
Por esta obra, el escritor (Tavernes de Valldigna, Valencia, 1949) también recibió el Premio de la Crítica en el pasado mes de abril y en aquella ocasión señaló que se sentía “desconcertado” ante este galardón, porque la novela era “muy amarga y desesperanzada”, aunque decía mirar al futuro “con un desánimo total”.
Y ayer Chirbes decía que se siente igual de pesimista, aunque aún se ríe mucho, porque la vida del ser humano es muy dura. “De todas formas, creo que el éxito del libro se debe más al movimiento civil que al libro”, subraya este autor que admira a Galdós y que otorga tanta importancia “a la forma como al fondo del libro”.- Efe