la emisora pública alavesa, Radio Vitoria, cumplió ayer ochenta años de cita ininterrumpida con los oyentes que siguen consumiendo este producto radiofónico emblemático de Vitoria/Gasteiz y resto del territorio alavés. Lo que comenzó como una aventura personal de un médico vitoriano, doctor Hernández Peña (1934), se convirtió en la emisora vitoriana por antonomasia y durante muchas décadas la única del mercado radiofónico local. La compra por la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Vitoria, por iniciativa de Vicente Botella Altube, responsable máximo de la entidad, aseguró la financiación de la emisora como una actividad social y cultural, hasta que en la década de los 80 fue adquirida por el Gobierno Vasco y posteriormente integrada en la empresa pública Euskal Irrati Telebista/Radiotelevisión Pública Vasca y desagregada de la Sociedad Española de Radiodifusión (SER), con la que mantuvo vínculos de colaboración durante más de cuarenta años. La llegada de la crisis y el ajuste financiero por parte de las arcas públicas plantea un reto inquietante a la emisora decana de la plaza, que debe superar para mantener su permanencia en el tiempo: el dimensionamiento de la programación y consecuentemente de la plantilla necesaria y recursos asegurados para mantener presencia y reconocimiento en el ámbito de emisión de la emisora que celebra 80 años. Consecuencia de lo anterior, también está la necesidad de fijar el encaje con la programación de Radio Euskadi, buscando eficacia y eficiencia en el gasto público complementado con recursos comerciales. En cualquier caso, sea cual sea el futuro de Radio Vitoria-EiTB, es tiempo de felicitar a todos los que han hecho esta radio durante ocho décadas y a los miles de oyentes de la misma que ha querido ser el pulso vivo de una ciudad y territorio. Zorionak denoi.
