Hubo un tiempo en la historia del periodismo escrito en el que era fundamental para la producción de un periódico estar abonado a una o varias agencias de noticias que suministraban muchos de los materiales informativos que las pequeñas redacciones no podían cubrir y más en el terreno de las noticias internacionales, donde solamente los grandes rotativos contaban con red propia de corresponsales para informar de lo que ocurría en las grandes capitales del mundo, Nueva York, Londres, París, etc. El mundo anglosajón, Francia y en menor medida España, desarrollaron empresas de comunicación para servir noticias, reportajes y entrevistas a los medios escritos y posteriormente a los audiovisuales y así surgieron agencias como Havas, Associated Press, France Press, Reuters o la agencia Efe, que está celebrando los 75 años de permanencia en un negocio que hoy tiene poco que ver con el de antaño. La revolución en las comunicaciones, a partir del desarrollo de internet en las líneas telefónicas permite recoger la actualidad cercana y lejana con la velocidad del rayo y las noticias llegan tarde o superadas por las nuevas fuente de información. Las agencias internacionales de noticias han tenido que modificar sus productos para satisfacer las actuales demandas de sus clientes, que valoran más las crónicas cuajadas, elaboradas y con innovación que la mera alerta informativa anunciando un atentado, tsunami o catástrofe. En el caso de la agencia español, en los últimos años ha estado en el disparadero de su desaparición y solamente la necesidad de cubrir un amplio mercado en español mantiene el pulso vivo de una agencia nacida, criada y desarrollada al amparo del poder político que veía en ella un instrumento de acción política hacia el interior y exterior del estado. Es verdad que llegar a casi ocho décadas de empresa, es título de gloria que hay que reconocer. Pues eso, zorionak.
