PAMPLONA. Esta pequeña localidad del valle de Baztán, situada a 77 kilómetros de Pamplona y próxima a la frontera, ha visto cómo su nombre pasaba de ser "conocido" a tener un "reconocimiento internacional" gracias a "Las brujas de Zugarramurdi", una película rodada en escenarios naturales de la zona que ha contado con la implicación de los vecinos, muchos de ellos figurantes.

"La promoción que nos ha dado la película a nivel internacional tan solo por llevar en su título el nombre de Zugarramurdi es algo con lo que no podíamos ni siquiera soñar, es impagable", ha manifestado a Efe Aihnoa Aguirre, gerente de la Sociedad Municipal "Zugarramurdiko Garapena SL", que se encarga de la gestión de los recursos turísticos municipales.

Aguirre tuvo ocasión de vivir en directo en Madrid la gala de los Goya acompañada por el alcalde de la localidad, Lázaro Dainciart, quien ha reconocido sentirse "muy contento" y abrumado por la experiencia.

"En todas partes aparecíamos, en periódicos en internet, en todo, es una propaganda amplia, muy grande, nacional e internacional que, por el coste, no la hubiéramos podido hacer nunca", ha comentado a Efe.

Ambos disfrutaron de la gala con la esperanza de que las nominaciones fueran convirtiéndose en premios, como sucedió en ocho de las diez candidaturas, ya que han llegado a sentir "como propio" el rodaje, según Aguirre, quien ha recordado la estrecha relación que llegaron a tener durante el rodaje, sobre todo, con el equipo técnico.

De ahí su "alegría" por unos premios que, en el caso de Terele Pávez, reconocida como mejor actriz femenina de reparto, fue vivido con especial emoción.

En este sentido Aguirre ha desvelado que, en el cóctel posterior a la entrega de premios, la actriz les reconoció que "se había preparado palabras de agradecimiento a las gentes de Zugarramurdi, pero por la emoción del momento no pudo decir nada".

La implicación de Zugarramurdi y, por extensión, de todo el valle del Baztán en la película ha sido grande. A finales de 2012 comenzó el rodaje en el que colaboraron organizando el "casting" y solventando las dificultades que la productora se podía encontrar en el medio rural.

Además, casi todo el pueblo participó como figurante, ha subrayado Aguirre, quien ha citado como ejemplo de la implicación el hecho de que 5 de octubre se contabilizaran "más de 700 'brujas' de la comarca, de Pamplona y San Sebastián".

"Luego han venido los frutos", ha añadido. Así la localidad ha estado presente en el estreno de la película en el Kursaal de San Sebastián, y ahora en los Goya.

Además, en los últimos meses, sobre todo en los puentes festivos de noviembre y diciembre, se ha notado una mayor afluencia de turistas en la zona, que llegan atraídos por la película y que quieren conocer la historia de Zugarramurdi y los lugares que aparecen en la cinta.

Aunque no saben hasta qué punto los Goya pueden suponer un espaldarazo para su promoción, ha asegurado que están expectantes de cara a la Semana Santa, y en este sentido ha avanzado que trabajan en el diseño de una visita basada en los escenarios en los que rodó Alex de la Iglesia.

El director vasco ofrece en su obra "una versión particular, que no tiene mucho que ver con la caza de brujas que se vivió en el siglo XVII" en Zugarramurdi, pero "los paisajes y la cueva son reales y fáciles de reconocer, y eso tiene mucho tirón", ha remarcado Aguirre.

Y es que son muchas las personas que acuden a esta localidad atraídas por las historias y leyendas que a lo largo de los años han ido surgiendo alrededor del proceso inquisitorial de 1610 y que quieren ver las cuevas en las que supuestamente tenían lugar los akelarres.