Madrid. Algo del espíritu del profesor "tozudo" e "idealista" al que da vida Javier Cámara en Vivir es fácil con los ojos cerrados, la nueva película de David Trueba, se le ha quedado dentro al actor riojano, quien aseguró convencido que "el mundo se mueve con pequeñas acciones". Inspirado en un caso real, el de Juan Carrión, el guión cuenta el viaje de ese profesor que en la España franquista de los sesenta enseñaba inglés con las canciones de los Beatles y, al enterarse de que John Lennon estaba en Almería rodando una película, decide ir a conocerlo. "No era una cuestión egotrípica de quiero conocer a este tío y luego contarlo, sino más bien tengo una tarea que hacer", resaltó Cámara, ya que lo único que Carrión quería era lograr que Lennon le rellenara los huecos de las letras que él sacaba por la radio. La historia demuestra que "el mundo se mueve con pequeñas acciones", insistió el actor, puesto que después de aquel encuentro, los Beatles empezaron a incorporar las letras en las carátulas de los discos."Él lo consiguió", defiendió, y "fue un pequeño milagro".
Sin las patillas y la camisa sesentera que caracterizan a su personaje, Cámara llevaba durante la entrevista una camiseta oscura de algodón y un sombrero borsalino, y ha perdido ese aire a Alfredo Landa o José Luis López Vázquez que tiene en el filme de Trueba. "Sí, hay algo de admiración por la década de los sesenta y setenta, esa generación que empatizó tanto con el público", admitió el actor, que dice haberse inspirado en "los Landa y los (Manuel) Alexandre", pero también en fotografías antiguas de su propia familia, para dar vida a Antonio San Román, al que define como "una especie de Sancho Panza en un 850". Consciente de que el físico condiciona los papeles que le ofrecen, el intérprete, de 46 años, cree que el que le ha tocado le ha ofrecido la posibilidad de "hacer de la debilidad virtud". "En la vida te toca tu físico, si estás en desacuerdo lo llevas mal, es mejor que te aclimates a tu cara, a tu pelo o a no tener pelo", afirmó. "Es cierto que a veces te gustaría poder hacer otro tipo de personajes, pero la comedia es un terreno vastísimo, puedes hacer comedia durante varias vidas y no repetirte", dijo Cámara, bregado también en dramas como Hable con ella o Los girasoles ciegos".
Volviendo a su último trabajo, rodado el verano pasado en Almería, junto con los jóvenes Francesc Colomer y Natalia de Molina, dijo que el papel le ha hecho también recordar su propia trayectoria como alumno. "Iba para arqueólogo pero suspendí varias, no había manera, no pasé el COU. Entonces mi profesor de Historia en Logroño Fernando Gil me dijo que en Madrid solo pedían segundo de BUP para entrar en la Escuela de Arte Dramático", relató. "No fui consciente de la importancia de aquel momento hasta muchos años después, cuando me di cuenta de que el tío acertó, vio algo que ni yo ni mis padres habíamos visto", enfatizó.
Uno de los momentos más especiales lo vivió justo antes de empezar a rodar, cuando se reunieron en Cartagena con el verdadero Carrión, que hoy tiene 89 años y continúa dando clases. "Era pura fuerza", comentó Cámara que tuvo ocasión de ver las anotaciones del puño y letra de Lennon en los cuadernos del profesor, y leer las páginas del diario en el que Carrión relata los diez días que estuvo buscando al músico de Liverpool. "Me emocionó mucho. Leí en voz alta su diario, desde el colegio hasta sus primeras ambiciones de ir a conocerlo, sus dudas, sus pesquisas", explicó. "Al finalizar, me dijo que tenía muy buen acento en inglés, eso era para él lo más importante para poder hacer el personaje", apuntó conmovido.
En un año en el que también ha trabajado con Cesc Gay en Una pistola en cada mano, Isabel Coixet en Ayer no termina nunca o Pedro Almodóvar en Los amantes pasajeros, Cámara aún tiene pendiente de estreno el largometraje La vida inesperada, de Jorge Torregrosa, que rodó en Nueva York antes de viajar a Almería.
Tras esta "racha espectacular", dice que se plantea volver a las tablas, en las que debutó en 1991 con El caballero de Olmedo."Me encantaría volver al teatro, estoy leyendo cosas y tengo ganas de probarme a mí mismo, ponerme a tono y lanzarme a esa aventura, a ver si soy capaz".