Vitoria. Después de un pequeño descanso, la trigésimo octava edición del Festival Internacional de Teatro de Gasteiz vuelve a encontrarse hoy con el público desde el escenario del Principal para recibir en esta ocasión al Ballet de Carmen Roche, que regresa a la capital alavesa para representar su particular adaptación de El sueño de una noche de verano, de Shakespeare.
No es la primera vez que la compañía madrileña toma parte en el certamen gasteiztarra con un montaje inspirado en las creaciones del dramaturgo inglés. Ya sucedió, por ejemplo, con Otelo. En este caso, la apuesta de la formación toma como aliados al trabajo coreográfico de Tony Fabre y los sonidos del compositor Henry Purcell para adentrarse en una propuesta entre la magia y lo real.
Son seis los bailarines que, haciendo en ocasiones varios personajes a la vez, dan vida a un montaje que se representa a partir de las 20.30 horas en un Principal que todavía tiene entradas a la venta por entre 18, 12 y 6 euros.
"El espectáculo incorpora los elementos esenciales de la obra del dramaturgo inglés: la universalidad de sus temas hablando de la muerte, el amor, la ira o la envidia; y el mundo mágico: de personajes de fábula, de trucos de magia, que permiten sorprender al espectador y adentrarlo en un mundo diferente. Todos estos ingredientes se unifican con un elemento principal: la danza. Ella será la principal protagonista de nuestra obra", explican desde la compañía.
Con estos elementos se construye una versión de un clásico que, como pasa con la gran mayoría de los títulos del dramaturgo inglés, mantiene una vigencia casi inexplicable. Eso sí, a ese fondo que mantiene su actualidad se une esta vez un cambio en la forma, esa utilización del lenguaje de la danza. Otras obras teatrales de sobra conocidas ya han servido a Roche para el mismo propósito, incluso cuando su compañía ha realizado propuestas para el público familiar. Hoy, eso sí, es momento para los adultos.