Vienen de estilos y generaciones diferentes pero han encontrado un punto en común para colaborar. Está en lo alto de la colina de la capital alavesa, un Gaztetxe que sigue soplando las velas de sus 25 años de actividad. A más de uno le puede sonar extraño encontrarse con un mismo tema en el que todos ellos han aportado su granito de arena, pero el resultado final avala que la apuesta, aunque arriesgada en apariencia, tenía su sentido. En Internet se puede escuchar a través de http://soundcloud.com/gasteizko-gaztetxea/bagarela-gasteizko-gaztetxeak, algo que ya han hecho más de un millar de personas.
En la coctelera se ha metido a Evaristo (Gatillazo), Juan (Soziedad Alkoholika), Iñaki (Betagarri), Sorkun, Kodigo Norte, Indarrap y los componentes de la Gasteiz Big Band, es decir, punk, rock, hardcore, hip hop, swing, ska... todo ello combinado en una canción en la que la música ha partido de Jimmy Bidaurreta (que también se ha encargado de la producción, los arreglos, la grabación y las mezclas) y la letra de personas que están o han estado en otras épocas involucradas en el espacio autogestionado. Revueltos, mejor.
En el origen están las diferentes ideas que en su día barajaron los actuales miembros de la Gazte Asanblada en colaboración con diferentes componentes del mismo grupo en otras etapas del Gaztetxe a la hora de planificar las celebraciones de este cuarto de siglo de andadura. Entre ese abanico de propuestas se encontraban dos proyectos que se están desarrollando en estos momentos. Por un lado, la elaboración de un libro. Por otro, la realización de un documental un tanto diferente para el que se pensó buscar una banda sonora acorde así como la creación de una canción propia del aniversario que se cumple en este 2013. Ahí es donde apareció el contacto de Bidaurreta, con lo que la maquinaria se puso en marcha para que naciera este Bagarela que ha conseguido reunir a un buen puñado de nombres propios de la escena sonora alavesa.
"Mi primera impresión cuando se pusieron en contacto conmigo desde el Gaztetxe fue que se trataba de un proyecto muy apetecible, que era una oportunidad al mismo tiempo que un reto", explica Bidaurreta, que recuerda como antes de grabar nada fueron unas cuantas las reuniones que se llevaron a cabo para ir atando cabos toda vez que la letra estaba compuesta y era el momento de ponerse con las notas. "Una de las cosas que teníamos clara desde el principio era que el tema tenía que rondar los cuatro minutos de duración, algo que con tanta colaboración podía ser complicado, aunque al final se consiguió".
Además, no hubo problemas, ni condiciones, ni reticencias por parte de los grupos y cantantes invitados. Todos aceptaron desde el segundo uno sin ni siquiera hacer demasiadas preguntas y más allá de que haya voces como las de Juan o Evaristo que no están tan acostumbradas a cantar en euskera aunque no sea ésta la primera vez que lo hacen. Cada uno mantiene su estilo, ya sea punk o hip hop, aunque por momentos pueda parecer mentira en una canción que se mueve entre el ska, el reggae, el swing, los ritmos latinos...
La parte instrumental no, pero todas las voces fueron registradas en el propio espacio de lo alto de la colina, reconvertido a lo largo de una jornada en estudio de grabación. "A día de hoy es relativamente sencillo tener una calidad más que interesante con pocos, aunque buenos, medios. Grabar allí nos daba un valor añadido muy claro", apunta el director de la Gasteiz Big Band, formación con la que también ha actuado allí. Uno a uno, los invitados fueron pasando delante del micro en una sesión que se produjo el domingo 26 de mayo.
Fue toda una experiencia. Aunque cada artista estaba citado a una hora, fueron coincidiendo "y vivimos momentos muy buenos. Sobre todo con Evaristo, que estaba lanzado", ríe Bidaurreta al rememorar una jornada en la que también fueron surgiendo aportaciones improvisadas de los participantes.
Coordinarlo todo ha tenido su cosa. También con la Gasteiz Big Band, puesto que a la agrupación alavesa la realización del tema le pilló con la celebración del Big Band Festival de por medio. Pero aún así se han ido reuniendo todas las piezas de un puzzle que desde hace unos días ya está disponible a través de Internet y del que se está preparando también un videoclip ya que se fueron rodando diferentes momentos de la grabación en el Gaztetxe, así como entrevistas con algunos de los participantes para incluirlas en el documental sobre los 25 años del espacio.
Las primeras impresiones recibidas no pueden ser más positivas. "Creo que están bien resueltos muchos de los problemas que se podían presentar y me parece que ha quedado un tema que funciona muy bien", comenta Bidaurreta. A partir de ahora, eso sí, es el momento de que otros se encuentren con este Bagarela y juzguen. O mejor, que disfruten.