Madrid. El director del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS), Manuel Borja-Villel, se destapó ayer con unas declaraciones en las que afirmó que el Guernica de Picasso es un "fetiche comercial", y añadió: "Todos tenemos en la puerta de la nevera un imán o una camiseta con el Guernica".
Borja-Villel, que desarrolló la ponencia El Guernica. Picasso en el MNCARS en el curso de verano Picasso y sus museos de la Universidad de Málaga, explicó como se ha contextualizado el lienzo del artista malagueño con otras obras en una de las salas del museo. Añadió además sobre la obra que "obviamente es un mito histórico" y que las demandas que hace el País Vasco sobre que se traslade a esa comunidad autónoma "reivindican el fetiche, se reivindica el cuadro, no el contexto, ni la historia".
El director del Museo Reina Sofía explicó, sobre la posible restauración del lienzo después de que haya acabado la labor del automatismo robotizado que tenía como objetivo hacer más de 20.000 fotografías que ofrezcan información precisa sobre el lienzo, que "no hay una voluntad de restaurar nada de entrada".
Al respecto, ha añadido que "la idea era tener la información más precisa, que de hecho la van a tener y la están analizando ahora, de cómo está la pintura y de cómo se comporta, pero de momento es sólo información, de hecho, el Guernica es frágil y no puede moverse pero está muy estable".
Borja-Villel señaló que lo único que no se mueve en el museo es el Guernica y añadió que "los restauradores están analizando la información y van a tardar un tiempo, se pasaron como cinco meses haciendo fotografías continuamente, y de entrada la idea es conocerlo exhaustivamente a nivel material y técnico".
Pertenencia del cuadro Por otro lado, mencionó que no ha habido nunca dudas sobre a quién pertenecía el cuadro y ha declarado que "el Guernica era propiedad del Gobierno español, en un momento determinado Picasso por lo visto no quiso cobrar, pero el Gobierno le pagó los materiales para que constase que era de su propiedad".
El dirigente del museo epxlicó el porqué de que el Guernica sea muy importante para el museo y afirmó que "el elemento más importante para nosotros son las obras de los años treinta, porque son un elemento local, años de la República y la Guerra Civil".
"A los artistas les interesaban otras cosas en esa época, tenían un posicionamiento político, cuestionaban la ambigüedad de las vanguardias, buscaban un arte popular que tuviese que ver con lo teatral, con la relación con el espectador y, en ese sentido, el Guernica es absolutamente esencial", explicó.