Vitoria. A no ser que algo cambie a lo largo del verano en las negociaciones entre los partidos políticos presentes en las Juntas Generales de Álava, en septiembre la ponencia creada el pasado mes de abril para la elaboración de un Plan Estratégico de Cultura para Álava se volverá a reunir pero para disolverse. Así sucederá tras el encuentro celebrado ayer en la Cámara foral, cita en la que se tenía que aprobar tanto el plan de trabajo como la lista de comparecientes, algo que al final no fue posible.
Como ya explicó este periódico la semana pasada, PSE-EE, EH Bildu y EB-Berdak habían consensuado ambas herramientas para comenzar las labores de una ponencia nacida tras la moción aprobada en un pleno de las Juntas llevado a cabo en febrero con el apoyo de los tres grupos mencionados y del PNV.
Sin embargo, según explicó el presidente de este grupo de trabajo, el socialista David Romero, tanto el Partido Popular como los jeltzales votaron ayer en contra tanto del plan como de la lista de comparecientes, lo que, al no presentarse tampoco ninguna alternativa, hace que, de facto, sea inviable seguir con la ponencia.
"Si no cambia nada, en septiembre volveremos a reunirnos pero será para cerrarlo todo", apuntó Romero que, aún así, explicó que la intención de los tres grupos que habían llegado al acuerdo es, cuando menos, "no perder el trabajo hecho y solicitar la comparecencia de las personas que incluye la lista en el seno de la Comisión de Cultura para poder, por lo menos, escuchar lo que puedan aportar".
De esta forma, la ponencia queda estancada y al borde del cierre casi antes de empezar a dar sus primeros pasos reales y efectivos. Cabe recordar que el 19 de abril se constituyó el grupo de trabajo siguiendo la orden de la moción aprobada en febrero, un texto en el que se explicitaba la necesidad de elaborar y presentar "un Plan Estratégico para el desarrollo cultural del territorio histórico". Salvo cambios de última hora, no será posible.