El intenso color rojo del vinilo no deja lugar a dudas. En sus surcos se esconde jazz, música tradicional, hip hop, pop... todo ello pasado por el sello propio de la Gasteiz Big Band, por ese tamiz compuesto de ritmo, baile y descaro que la agrupación siempre demuestra. W'Ellington es ya una realidad editada por Gaztelupeko Hotsak dentro de su subsello Dantza Baltza. O mejor dicho, 500 realidades que están a la venta por 10 euros cada una.

El disco ve la luz justo ahora, cuando la formación alavesa cuenta las horas para la puesta en marcha de la décima edición del Big Band Festival, en cuyo marco pondrá de largo este trabajo frente al público en los conciertos que ofrecerá tanto mañana a las 21.30 horas en el Jardín de Falerina, como el sábado a la misma hora pero en Elciego. Cuatro son los temas que componen este EP, destacando la versión de la Retreta de San Prudencio que el grupo ha configurado junto a Kodigo Norte. "Nos sentimos orgullosos de poder colaborar con los grupos de aquí para crear entre todos una escena sin complejos", apuntó ayer Jimmy Bidaurreta, director de la Gasteiz Big Band, a lo que Dj Loro, miembro del cuarteto de hip hop, añadió que esta unión de sonidos ha sido todo un reto puesto que "esto no tiene nada que ver con lo que hacemos de manera habitual".

Eso sí, no queda ahí la cosa. De hecho, el disco se abre con Sir Duke, versión de la canción que Steve Wonder dedicó a Duke Ellington. De hecho, el nombre del compositor, director y pianista de Washington sirve a la agrupación para bautizar el trabajo al combinarlo con el del Duque de Wellington por aquello del bicentenario de la Batalla de Vitoria, aunque Bidaurreta quiso dejar claro que lo que se busca es poner en valor a la música, para nada el hecho de que "unos militares matasen a otros". El sonido de los cañones no es aquí bien recibido, por suerte.

Completan este redondo estreno la particular visión del Clocks de Coldplay, y del Moanin' de Bobby Timmons. Así se configura un vinilo convertido en formato fetiche para la banda alavesa por varios motivos.

En pocas semanas, además, el lanzamiento del disco vendrá acompañado por el del vídeoclip que el realizador alavés Beñat Fontaneda y la Gasteiz Big Band grabaron el pasado sábado en pleno mercado del Casco Viejo tomando Sir Duke como base, una grabación "compleja" según el director aunque también satisfactoria. En poco tiempo se podrá ver el resultado de un trabajo en el que la agrupación contó también con la colaboración de la actriz Carmen San Esteban, que se transformó en una marquesa de Montehermoso que hace las veces de Dj. "La verdad es que es mi primera vez", rió la intérprete.