Muchos, más bien muchas, son quienes esperan ansiosos la adaptación cinematográfica de 50 sombras de Grey, la trilogía de E. L. James que se ha convertido en el fenómeno editorial de los últimos años. La busqueda del actor que ponga cara y cuerpo en la gran pantalla a Christian Grey, el reverenciado protagonista de la saga, genera tantos debates libidinosos como copiosas búsquedas en internet.

Pablo Pau no es multimillonario ni mundialmente codiciado pero sí tiene algo de lo que carece el personaje literario: romanticismo. En su versión más sadomasoquista, el hostelero puso en marcha en abril un casting para descubrir artistas locales y promover las diferentes artes escénicas en Vitoria-Gasteiz. Y lo hizo bajo la versión de un concurso, New Art Show, que encuentra acomodo en la terraza de La Bellota, en la calle Canciller Ayala. A diferencia de Grey, los requisitos para participar en la muestra no incluían tener una apariencia lasciva y lujuriosa. Solo se requería ilusión, educación y respeto hacia los demás; buen rollo en resumen. Y a fe que lo han conseguido a tenor del éxito de la convocatoria. De la misma manera que se siente la piel de gallina en una entrevista y el bamboleo de las rodillas al enfrentarse al público, así se han mostrado los artistas que durante el último mes han desfilado por el escenario de La Bellota. Actuaciones de funk, rap, rock, espectáculos de danza oriental, flamenco, performance o sesiones acústicas dan forma a una programación que se extenderá hasta junio; será entonces cuando el público, por votación popular, designe a los tres ganadores entre decenas de intérpretes participantes, caso de Sin Rumba Fija, Canela Pura, David Varas, Begoña Martín, Mary Conan, Kubers o la agrupación Sarasvati. Pero hasta que llegue el veredicto final el casting sigue abierto con los pases de la próxima semana a cargo de José Manuel Imaz, Kongluten o La Omega y Dj Rubi Real.

Aprovechando el impulso creativo, y en su afán por revitalizar la zona de Desemparadas, Pau lidera asimismo una iniciativa cultural de tintes benéficos que se celebrará este próximo sábado 18 de mayo. La zona de la Plaza de Abastos acogerá en horario vespertino una fiesta popular con actuaciones musicales, djs, monólogos de humor y hasta un pintxo pote solidario. El total de lo recaudado se destinará a la Asociación Alavesa de Trabajo Social que desarrolla su labor en la atención a personas en riesgo de exclusión social, sea cual sea su problemática y situación.

La feria en mayo

La feria de abril de Sevilla en pleno mayo vitoriano. Desde sus comienzos la fiesta de la primavera sevillana se erigió en una excusa perfecta para reunir a autóctonos y foráneos en torno a un evento social y gastronómico; una celebración que animaba a compartir risas dejando para la semana que viene la rutina del resto del año. Esa es la esencia con la que el restaurante La Huerta arrancaba ayer un fin de semana dedicado en cuerpo y alma al fino, el rebujito, las puntillitas y el jamón. Como viene siendo habitual durante los últimos años, Mikel Fiestras, Sofía Casado y todo su equipo engalanan su local de la calle Dato, y de paso a ellos mismos, para montar su particular caseta sevillana para gozo de aprendices de palmeros. Una buena cuadrilla de amigos y asiduos del restaurante se dieron cita ayer en el alumbrao, punto de partida de la fiesta de estos días, para moverse al compás de bulerías y soleás. Sin restricciones ni necesidad de invitación previa, las gambitas y la manzanilla se mezclaban con la música y los brindis fraternos. Mientras un maestro cortador de jamón se empeñaba en abastecer los platos de los comensales, Maite Villegas, Pablo Varona y Manuela Bandeira, tras la barra, no perdían detalle del ambiente. La feria culminará este próximo jueves con una cena maridaje en la que se degustarán platos, vinos y quesos típicamente andaluces como el Payoya, Balanchares y Pinsapo, de la mano de La Casa de los Quesos.