amsterdam. La estrella del pop adolescente Justin Bieber volvió a crear polémica el pasado viernes cuando, con motivo de su visita al Museo de Ana Frank en Amsterdam, firmó en el libro de visitas diciendo que "ojalá la joven hubiese sido una belieber" (término para referirse a las fans del joven cantante canadiense). "Verdaderamente inspirador poder venir aquí y comprobar que Ana era una gran chica. Ojalá hubiera sido una belieber", dijo el cantante en el libro de visitas, un comentario recogido por la página de Facebook del museo.

El comentario despertó inmediatamente la respuesta de miles de usuarios de la red social, que se mostraron molestos por el comentario de Bieber. "Es un engreído. Es una importante figura histórica, así que muestra más respeto", escribió uno de ellos.

El museo se mostró abrumado por la polémica creada con la visita, y decidió publicar una nota en la que dijeron estar encantados de recibir a Bieber. "Creemos que es positivo que se tomara el tiempo y el esfuerzo de visitar nuestro museo. Estaba muy interesado en la historia de Ana Frank y se quedó durante una hora. Esperamos que su vista inspire a sus fans a saber más de la vida de Ana y, ojalá, a leer el diario", aseguraba la nota.