LOS ÁNGELES. "Argo" consiguió tres estatuas doradas, lo mismo que "Los Miserables", mientras que "Lincoln", nominada en 12 categorías, conquistó solo dos Óscar, mismo número que "Skyfall" y "Django desencadenado".

El cineasta taiwanés Ang Lee se alzó con el premio de mejor dirección por "Vida de Pi" cuando las previsiones apuntaban a un triunfo de Steven Spielberg ("Lincoln"), quien se tuvo que conformar con ver cómo el protagonista de su largometraje, Daniel Day-Lewis, recogía la estatuilla de mejor actor, la tercera en su carrera y un récord en esa categoría.

El éxito del británico Day-Lewis era previsible, lo mismo que el de Jennifer Lawrence por "El lado bueno de las cosas" como mejor actriz. La joven, emocionada, acabó por los suelos al caerse por las escaleras que daban acceso al escenario donde el esperaba su Óscar.

Tampoco hubo sorpresa en la victoria de Anne Hathaway como mejor actriz de reparto por "Los Miserables", mientras que Christoph Waltz logró el premio equivalente en categoría masculina por "Django desencadenado", de Quentin Tarantino.

Se trató del segundo Óscar en la carrera del austríaco quien ya tenía ese premio por "Malditos bastardos" (2009), también de Tarantino, quien se llevó a su casa el premio de mejor guión original por "Django desencadenado".

"Argo" que se quedó fuera de la competición de mejor director y solo tenía una nominación interpretativa (Alan Arkin, secundario), sí se llevó el galardón de mejor guión adaptado, así como el premio de mejor edición o montaje.

El principal triunfo latino corrió a cargo del chileno Claudio Miranda, que se hizo con la primera estatuilla de su carrera como director de fotografía gracias a su trabajo en "Vida de Pi".

También de Chile era "No", cinta candidata a mejor película en habla no inglesa pero que vio cómo la austríaca "Amor" se imponía en su categoría.

Ni el español Paco Delgado ni el mexicano José Antonio García se alzaron con los galardones que disputaban: mejor vestuario ("Los Miserables") y mejor mezcla de sonido ("Argo"), que fueron a parar a "Anna Karenina" y "Los Miserables", respectivamente.

El otro ganador con componente latino fue "Inocente", producción de Sean Fine y Andrea Nix, que logró el Óscar como mejor cortometraje documental por contar el drama de superación personal de una adolescente, inmigrante indocumentada, que tras una infancia de abusos y vivir en las calles encuentra la ilusión para seguir adelante en su sueño de ser artista.

Esta edición de los Óscar, que tuvo como maestro de ceremonias al comediante Seth MacFarlane, fue la primera en tener un hilo argumental temático que estuvo dedicado a homenajear el género musical, y contó con la aparición por sorpresa de la primera dama estadounidense, Michelle Obama, que se encargó de anunciar el premio a la mejor película.

Otra de las rarezas de esta gala fue el empate que se produjo en la categoría de mejor edición de sonido que fue a parar ex aequo a "Skyfall" y "La noche más oscura".

Esta circunstancia se había dado anteriormente en cinco ocasiones, la más conocida en 1968 cuando Katharine Hepburn y Barbara Streisand se repartieron la gloria como mejor actriz por sus papeles en "El león en invierno" y "Funny Girl", respectivamente.

"Skyfall" fue agraciada también con el galardón de mejor canción por el tema de la británica Adele, quien entonó esa melodía durante la gala, mientras que la mejor banda sonora fue para el compositor Mychael Danna por "Vida de Pi".

Doblete hizo también el estudio Disney que dominó en las categorías de animación con "Brave" como mejor filme y "Paperman" como mejor cortometraje.

"Searching for Sugar Man", tal y como estaba previsto, se llevó la estatuilla de mejor documental.

"Lincoln" ganó su segundo Óscar por el mejor diseño de producción, "Los Miserables" ganó como mejor peluquería y maquillaje y "Life of Pi" obtuvo un cuarto premio por los mejores efectos visuales.