Vitoria. Si el pasado viernes fueron los representantes de Bildu en la Diputación y el Ayuntamiento de Gasteiz los que pidieron la constitución de una Mesa de la Cultura que incluyese al sector para intentar buscar soluciones a la actual situación de abandono público, el PNV presentó ayer una propuesta concreta para la elaboración, a lo largo de 2013, de un plan estratégico municipal, un proceso que debe ser impulsado por el Consistorio pero, bajo ningún concepto, tutelado por la institución, según explicó el edil Iñaki Prusilla.

Tras conseguir a principios de año que Gasteiz se sumase a la Agenda 21 de la Cultura, los jeltzales quieren que se den pasos en uno de los objetivos fundamentales de esta red de ciudades: elaborar una estrategia cultural local. La situación de recortes, cierres de equipamientos y dejadez institucional necesita de medidas urgentes, y no de una política que se resume en el reparto de subvenciones entre citas que sólo se miden por la afluencia de público, según el PNV.

El Plan Estratégico de Cultura de Gasteiz tendría un proceso de elaboración basado en una serie de fases. En primer lugar se establecerían los fines del propio proyecto y las áreas de intervención mediante un Consejo constituyente de técnicos y representantes externos. Posteriormente, se realizaría un llamamiento y ronda de contactos con todos los agentes interesados. A partir de ahí se elaboraría un borrador de índice de temas y transcripción de la situación actual del sector cultural en la ciudad que irían acompañados de una propuesta de objetivos prioritarios y líneas de actuación para los próximos tres años. Tras el análisis de todo este material por el Consejo constituyente, se incorporaría a la web municipal abriendo una fase de consulta y recepción de propuestas. Esta fase se culminaría con una ronda de reuniones y puesta en común de los resultados obtenidos.

La elaboración del plan continuaría mediante unas jornadas de reflexión y debate donde se analizaría toda la información generada y las aportaciones recibidas. Las conclusiones y resoluciones de estas jornadas se reunirían en un documento definitivo que, a partir de entonces, pasaría a implementarse en todas las áreas municipales implicadas. Por último, se pondría en marcha un Consejo de seguimiento y evaluación del desarrollo del plan para evitar desviaciones.

"Es nuestra propuesta, no queremos imponer nada", explicó Prusilla, aunque sí dejó claro que si Javier Maroto y su gobierno hace oídos sordos, el PNV está dispuesto a arrancar el proceso sin esperar al Partido Popular. "Con el Plan Estratégico de Cultura apostamos por evitar la improvisación en la labor de las instituciones, por dar voz a todas y todos a la hora de diseñar la política cultural de los próximos años para Vitoria, por incorporar a la programación cultural criterios como el del aprovechamiento de infraestructuras, el fomento de los nuevos creadores y la generación de nuevos público", comentó el edil.

En este sentido, Prusilla quiso recordar que, además de otras implicaciones, la cultura también es un sector económico que genera riqueza, puestos de trabajos e industria, aunque esto se suela olvidar.