Vitoria. Será la segunda edición de Gastroswing, pero donde caben dos, ya se sabe. Parece más conjugado en triángulo este encuentro de comida y baile, que arranca hoy su programación. Una programación lúdica, didáctica y gastronómica. Primer tres. De viernes, sábado y domingo. Derramada por Correría, Sancho el Sabio y Zabalgana. Clases de parejas, followers, iniciación... Tres. Tres. Tres...

Y tres citas abren, precisamente, desde esta misma tarde, el festival. Villa Suso, de 18.00 a 23.00, será el punto de acreditación, chequeando los últimos detalles y repartiendo el material a los dos centenares de personas -llegadas, en muchos casos, de lejanas pistas de baile- que toman parte en el encuentro.

La calle Correría comenzará, a partir de las 20.00, a ejercer las labores de socialización, convirtiéndose de nuevo, un año después, en La calle del swing. Tiendas abiertas hasta medianoche y bares -Malquerida, Tabanco y Kokodrilo- alimentando e hidratando a los apuntados a los packs del festival. La actividad se trasladará hasta Artium, donde profesores y Djs se presentarán en sociedad en una cita organizada junto a Gauekoak.

Sábado. Comienza el sudor. Y el disfrute. El palacio de Congresos Europa abre sus puertas a todo el hervidero de modalidades didácticas, de 10.00 a 13.30 horas, conectando después con la vecina calle Sancho el Sabio -perfecta peatonalización para el baile- y una nueva fiesta callejera, que pondrá pintxos para los apuntados en el restaurante Los Pedroches. Desde la calle Luis Heinz -¿será empatía gastronómica con el ketchup?-, los participantes bailarán por las carreteras alavesas hasta la sombra de la kupela y el chuletón de la sidrería Iturrieta de Aramaio, con más sorpresas de tradición vasca incluidas más allá de las del paladar.

Los viajeros tendrán dos horas de descanso a la vuelta, hasta que, previo pintxo-poteo en el Virgen Blanca -los pies sacan la lengüeta, el estómago, apenas-, la actividad señale con todas sus flechas hacia la sala Jimmy Jazz, donde el plato fuerte del concierto de The Big Jamboree se servirá con puntualidad, a las 22.00, a ritmo de rhythmyblues, jumpyjive, jump blues y rockyroll de los años 50, en temas propios o versiones de canciones de artistas como Louis Prima, Big Joe Turner, Louis Jordan, Roy Brown o Wynonie Harrys. Le seguirán -más platos- las pinchadas de Dj Risi, Dj Patxi y, cómo no, Charly Fáber.

¿Se levantarán los alumnos a las 9.00 del día siguiente? A esa hora empieza, al menos, el último turno de clases en el Europa. Un autobús, esta vez urbano, desplazará luego a los integrantes hasta Zabalgana, con un nuevo clandestino en la también propicia pista de baile de la terraza del bar Mainton, antes de que el Virgen Blanca, "esta vez sentaditos", ponga el DO de intestino con el menú Gastroswing.

En el apogeo del revival del lindy hop, Gasteiz vuelve con fuerza redoblada a convertirse en uno de los puntos de referencia del continente en lo que a programación y original maridaje se refiere. ¿Qué hace mejor juego con el baile que una buena inyección de nutrientes para recuperar fuerzas? ¿Qué mejor escenario que el de las calles? ¿Qué fecha más idónea que la que propone el amanecer primaveral? Tres preguntas, tres, porque esta segunda edición -aunque en el baile tres son multitud- juega al cubo. Gas-tro-swing. Lin-dy-hop. A-bai-lar.