El escritor bilbaíno Pedro Ugarte, ganador del V Premio Logroño de Novela -dotado con 45.000 euros- con El país del dinero (Algaida), hace en su nueva obra crítica social, una alegoría del boom inmobiliario y dilemas morales, pero advierte que no es un texto "oportunista". Ugarte pone el foco sobre una ciudad muy parecida a la suya, con una ría que actúa de frontera entre una margen rica y una margen pobre, y tres personajes con vidas entrelazadas, de diferentes estratos sociales y económicos. Se asombra el autor vizcaíno de que el dinero, aunque sí se ha utilizado habitualmente en los argumentos de la novela negra, aparece "muy poco como tal en las novelas de otros géneros, cuando es evidente -dice- que lo pone en marcha todo y mediatiza las relaciones entre las personas". En este caso, el lector podrá seguir las andanzas de Jorge, el narrador de la historia, de un linaje próspero en otro tiempo, pero que ahora sobrevive gracias a ser el empleado de Simón López de Chávarri, un viejo amigo, de uno de los apellidos de más alta alcurnia de la sociedad en la que viven. En la vida de estos dos personajes se cruzará una chica de melena negra, proveniente de un barrio obrero, ambiciosa y atractiva, de nombre Sharon.