DONOSTIA. La consejera de Cultura, Blanca Urgell, y la diputada foral de esta área, Ikerne Badiola, han hecho esta propuesta a los representantes legales de los Chillida en una reunión en Donostia que inicialmente iba a celebrarse con los herederos.
Los abogados han planteado a las responsables institucionales algunas dudas y éstas han hecho diferentes planteamientos de gestión para poder reabrir el museo en el plazo "más breve posible", una vez descartada la opción de compra, ya que con la crisis económica las administraciones públicas no pueden abordarla "de ninguna de las maneras", ha dicho Urgell a los periodistas.
La consejera cree que con sus propuestas están poniendo "las cosas fáciles" a los hijos del escultor para hacer posible la apertura de un recinto que cerró por su inviabilidad económica desde la gestión privada.
Urgell y Badiola han explicado a los abogados que la vía de un convenio de colaboración con la Fundación Chillida-Belzunce sería el camino más conveniente en la actual situación económica, que podría suponer que los herederos del escultor gestionaran el museo y recibieran aportaciones públicas para cubrir el déficit, que las instituciones se hicieran cargo de esta labor directamente o que se buscara una fórmula mixta.
No se ha hablado de "números", ni de qué implicaría esa entrada de las instituciones en el museo y qué recibiría a cambio la familia.
Urgell ha precisado que la fórmula del convenio es la opción que ya tienen "más trabajada", aunque sus términos "siguen sin estar definidos", ya que, antes de abordar los "detalles técnicos", incluidos los montantes económicos, la familia debe decir si le parece "una buena idea" volver a abrir Chillida Leku al público.
Ha señalado que no tenían "una percepción clara" de la posición de los Chillida sobre la gestión, por lo que ahora esperan haber resuelto las dudas y que los herederos se pronuncien, algo que no han hecho los representantes legales, que han ejercido de emisarios únicamente.