Madrid. El actor estadounidense Brad Pitt ha anunciado que dejará las pantallas dentro de tres años y que pasará a dedicarse a la producción y el desarrollo de varios proyectos cinematográficos, según afirmó el propio intérprete en el programa 60 minutes de la televisión australiana. El protagonista del largometraje El curioso caso de Benjamin Button confesó sus intenciones de dejar la actuación al cumplir los 50 años de edad a la periodista Tara Brown, quien recibió tan sorprendente anuncio durante una entrevista promocional de su filme Moneyball.

"Estoy disfrutando mucho el lado de la producción cinematográfica y del desarrollo de las historias, colocando piezas. Poner sobre la mesa historias que de otra manera lo tendrían muy difícil", explicó el dos veces nominado a los premios Oscar como actor, pero también productor de películas como El árbol de la vida, ganadora en Cannes.

Su aspiración tras esta decisión no es convertirse en un hombre feliz. "Pienso que la felicidad está sobrevalorada, de verdad lo pienso. Creo que a veces eres feliz y a veces no. Es demasiada presión estar feliz, no sé. Realmente me da igual. Sé que lo seré algunos momentos y en otros no. Satisfecho, en paz. Esas serían metas más para mí", concluyó.

Aunque no expuso razones claras, reconoció que "la sobreexposición mediática se ha convertido en algo incómodo", especialmente desde que ha formado pareja y familia de seis hijos con Angelina Jolie. "No creo que el mundo esté tan interesado en mi vida. Creo que mi vida hace que algunas publicaciones vendan más, así que creo que hay un negocio alrededor de ello". Y, pese a su profesionalidad, cuando empieza a afectar a sus hijos, su instinto de defensa de la camada reacciona.