Madrid. Diez millones de euros, cientos de audiciones para elegir al elenco y la ampliación de un teatro son sólo algunos de los retos que ha habido que superar para traer a Madrid El rey León, el reconocido musical que se estrena el día 20 en Madrid, donde se mantendrá en cartel, al menos, dos años.

De la expectativa que ha despertado este montaje, que pasó desde la factoría Disney a los escenarios de Broadway en 1997, tres años después de estrenarse en el cine, y que ya han podido ver 60 millones de personas en 18 montajes distintos en 13 países, da muestra que una semana antes de su estreno ya se han vendido 80.000 entradas, tres veces más que con cualquier otra producción. "Han sido tres años haciendo malabares para conseguir traerla pero es apasionante ver el resultado", resume Julia Gómez Cora, directora de la productora Stage Enterteinment, socia de Disney para este montaje. "Es un sueño que ha requerido mucho esfuerzo, tiempo y dinero, incluida la remodelación del Lope de Vega, el único teatro en el que puede hacerse en España", explicaba ayer Gómez en rueda de prensa junto al consejero delegado de Walt Disney España y Portugal, Simón Amselem; el directivo de DisneyThetrical Group Felipe Gamba y el director asociado del musical, John Stephanuk.

El español se convierte así en el séptimo idioma al que se traduce la obra, ambientada en la sabana africana, y que en escena se combina con "el sudafricano". La traducción y adaptación al castellano está firmada por el autor de El método Grönholm, Jordi Galcerán. "Este primer intento de llevarlo al habla hispana ha enriquecido el show", aseguró Stephaniuk, que no ha descartado que, dentro de unos años, pueda viajar a otro país hispano.

El mexicano Carlos Rivera, "muy orgulloso" de ser "latinoamericano", ha confesado que hacer de Simba, el cachorro que llega a ser el "rey de la Selva", es "uno de los grandes sueños" de su vida y que siempre ha tenido "la premonición" de que la protagonizaría. Esta parábola del paso de la niñez a la madurez, que contiene, dicen, "los primeros 15 minutos mejores de la historia de Broadway", se transformó en musical gracias a Julie Taymor, que puso como condición indispensable para su montaje en otros países que en todos haya un mínimo de seis intérpretes sudafricanos. A ellos se suman en España otros 47 actores. Los 11 niños que aparecen son de Madrid y fueron seleccionados a partir de un taller de interpretación. La música que se interpreta en directo es la banda sonora de la película, compuesta por Elton John y el letrista Tim Rice. Para la producción se ha hecho cada traje a mano, con sedas traídas de África. Cada actor cuenta con una máscara que permite una doble personalidad para humanizar a animales y plantas, como en la película, que se reestrenará estas Navidades en 3D.