sitges. Bryan Singer, director de clásicos modernos del cine fantástico como X-Men, dijo ayer en Sitges que para él "las películas sin corazón no son interesantes", y que, aunque sean adaptaciones de cómics, pueden incluir cuestiones sociales. Antes de recibir el Gran Premio Honorífico del Festival de Cine de Sitges por su "visión innovadora a la hora de abordar las adaptaciones cinematográficas de los superhéroes del cómic", Singer participó en una multitudinaria rueda de prensa en la que reconoció que desde muy joven -ahora tiene 46 años- le encantan las películas de género.

Tímido confeso, dijo que para él es "un gran honor" poder recoger este premio en un festival en el que se siente muy cómodo y al que vendría como público. "Esto no es un mercado, es un festival para los fans del género", apostilló. A preguntas de los periodistas, Singer, que también produce House, rememoró sus inicios a principios de los 90 con Public Access, con la que ganó Sundance, lo que le abrió la puerta al circuito y le ayudó a obtener la financiación necesaria para Sospechosos habituales, con la que se dio a conocer al gran público. El cineasta dijo que las películas, aunque sean adaptaciones de cómic, pueden incluir cuestiones sociales y ha destacado que en X-Men el núcleo central es la tolerancia.