Vitoria. Hace dos años, la impecable trayectoria de Silverspace se convertía, de repente, en carrera. Uno de sus proyectos cortos -pero siempre a largo plazo- había cuajado en el panorama festivalero y conseguía, como última guinda, colarse en la preselección a los premios más populares de la cinematografía. Perpetuum Mobile no conseguía finalmente pasar la última cata. La tenacidad es una de las virtudes de todo proyecto laboral y los responsables de la empresa gasteiztarra saben un rato de eso, saben que tras una carrera llega siempre la preparación para otra. Oscar 2.0. Silverspace está de nuevo camino de la estatuilla, con Daisy Cutter.
Hay dos condiciones que posibilitan a un cortometraje estar presente en una preselección de la categoría de animación de los premios de la academia norteamericana. Por un lado, haber sido premiado en un festival del circuito principal, de los denominados de clase A. Por otro, que haya sido estrenado en una gran pantalla. Es complicado para una pieza de animación imponerse en los grandes festivales a cortos de imagen real, pero Daisy Cutter debutó comercialmente durante los días 16,17 y 18 de septiembre -el pasado fin de semana-, de nuevo, como sucedió en la anterior ocasión, en los Cines Laemmle del West Hollywood de Los Ángeles, y por ello, puede optar una vez más a la preselección al Oscar en la 84ª edición de la cita con el séptimo arte.
"Estamos contentos y convencidos de que la próxima vez entraremos entre los nominados. Eso seguro", afirmaba en enero de 2009 el codirector de ambas cintas, Rubén Salazar, tras conocer que Perpetuum Mobile, entre las cuarenta últimas seleccionadas, no tenía finalmente un puesto entre las cinco propuestas que iban a sudar la butaca en la entrega de premios. Con el tiempo, en la empresa alavesa han sabido que esa butaca estuvo realmente cerca. La historia sobre el joven Da Vinci llegó a incluirse entre la lista de las diez últimas favoritas.
Hay buenos augurios para esta nueva carrera -de fondo, dura unos meses- hacia el premio entre premios. Para empezar la experiencia, ya que en el universo de Hollywood, bien es sabido, cuentan mucho el bagaje y las formas. Para continuar, el nombre de Silverspace, que poco a poco es un clásico del boca a boca. Y, para finalizar, los premios. Mientras Perpetuum Mobile llegaba a la pugna con una veintena, Daisy Cutter suma el doble, en concreto 43 galardones internacionales, dos de los últimos en Ventura y Temecula, dos certámenes que se celebran en, adivinen,... California.
Silverspace espera ya las novedades que depare el siguiente corte de los Oscar, una expectativa que se combina con la de otro premio, el del mejor corto sobre desarme, que se entregará el 27 de octubre en el British Museum de Londres, con presencia del alcalde de la city incluida. El que siembra cosecha y, aunque se llame carrera a los Oscar, lo de la empresa alavesa se hace con pasos cortos... que llevan al salto.