DONOSTIA. Pocas horas antes de recoger el Premio Donostia en el Kursaal, Close (Greenwich, Connecticut) recibe a un grupo de periodistas en una habitación del hotel María Cristina. Pese al ajetreo de entrevistas y ruedas de prensa, la actriz se muestra risueña y muy interesada en hablar de Albert Nobbs, la película de Rodrigo García en la que no solo actúa; también ha participado en la elaboración del guion y en la dificultosa producción. Tras cinco intentos fallidos por conseguir el Oscar -su última candidatura fue por el personaje de marquesa de Merteuil en Las amistades peligrosas (1988)-, el papel de mujer que se hace pasar por hombre en la Irlanda del siglo XXI podría conducirle a ganar por fin el eunuco dorado que la Academia le ha negado durante tres décadas.

'Albert Nobbs' le ha costado 14 años de trabajo. ¿Tan mal están las cosas en Hollywood para sacar adelante proyectos personales?

Sí, yo suelo definir el cine independiente de Estados Unidos como aquellas películas que casi no llegan a hacerse. Es doblemente difícil lanzar un proyecto como Albert Nobbs porque a la gente le cuesta imaginar cómo va a ser la película. Como productora, yo podía decirles que el filme iba a tener humor y otros elementos, pero la gente no llegaba a entenderlo. Me costó mucho más vender el proyecto porque es un tipo de película diferente. En los últimos años Hollywood se ha ido alejando de proyectos como este.

Usted es conocida por papeles intensos y dramáticos, aunque a veces explota cierta vena paródica en personajes como los de '101 dálmatas' (1996) o 'Mars Attacks' (1996). ¿Le gustaría hacer más personajes así?

Sí, bueno, me interesaría, pero todo depende de los guiones que me lleguen. Creo que es difícil que me propongan papeles cómicos y lo cierto es que en mi carrera siempre me han ofrecido un mayor número de personajes dramáticos.

¿La televisión ofrece papeles más complejos a los actores maduros?

Sin duda, por supuesto. Creo que algunos de los mejores guionistas del momento trabajan en la televisión, especialmente en la televisión por cable, en las series de largo formato como las que produce la cadena HBO... El talento joven que puede verse ahora en la televisión no abunda en el cine.

¿Qué recuerdos tiene de un personaje tan determinante en su carrera como el que interpretó en 'Atracción fatal' (1987)?

Todo son recuerdos buenos, fue mi primer papel como estrella, un personaje muy emocional del que la gente todavía habla en América. Fue clave en mi carrera.

Protagonizó esa película al cumplir los 40 años. ¿La fama tiene que llegar a una edad madura como en su caso?

Puedes decir que tú controlas tu carrera pero en realidad no puedes. Es imposible prever qué va a ocurrir. Además, creo para aprender el trabajo de actor es mejor trabajar en el teatro, porque no es la misma experiencia que ir directamente al cine, donde hay limusinas, gente maquillándote, arreglándote el pelo... Hay demasiadas cosas que te distraen de aprender el oficio. Di una charla en un instituto de artes escénicas y alguien me hizo una pregunta sobre la alfombra roja. Entonces le respondí: "Déjame decirte una cosa: si quieres ser actor para estar en la alfombra roja, no te metas en esto". El trabajo de actor no tiene nada que ver con eso. Lo de ser estrella puede durar un tiempo, pero si aprendes el oficio de actuar te va a durar más.

¿Es el Oscar la única espinita que tiene clavada Glenn Close?

El tema del Oscar no me quita el sueño. Sería un gran honor conseguirlo pero jamás he elegido un papel pensando en ganar un Oscar... Sería una locura hacerlo así, como ponerte una pistola en la cabeza. Por la naturaleza de mi profesión, además, no creo en las cosas hasta que ocurren de verdad. No sirve de nada obsesionarte con ello. Sería un gran honor ser reconocida con el Oscar, sí, pero también soy consciente de que es muy difícil escoger a un ganador entre todos los candidatos, porque los actores son distintos, los papeles también... Además, la elección está relacionada con la política, con campañas de apoyo y otras cosas en las que yo no quiero entrar.

¿Y espera que la Academia por fin le premie por su trabajo en 'Albert Nobbs'? Suena como candidata aunque no se saben las nominaciones.

Ocurrirá lo que tenga que ocurrir. Ahora bien, debo añadir que sería increíble lograr el Oscar por esta película porque nunca en mi vida he estado tan involucrada en un proyecto en el que he sido coguionista, actriz y productora.