Mérida. La directora del Festival de Mérida, Blanca Portillo, que aseguró ayer que no tiene "ningún control" sobre las cuentas actuales ni pasadas del certamen, será Tiresias en la Antígona que cierra esta edición, una versión fiel a Sófocles, pero con el filtro ético y estético de una compañía contemporánea.

El mexicano Mauricio García Lozano dirige desde hoy Antígona, un montaje con Marta Etura como protagonista, del que destacó la experiencia de estar en el Teatro Romano, "de jugar con sus profundidades y su energía", hasta dejarle "muy cansado", reconoció en una rueda de prensa. Una comparecencia en la que también participó Portillo, quien fue preguntada por el informe del Tribunal de Cuentas sobre las cuentas generales de la comunidad extremeña de 2006 y 2007, en el que se detectan deficiencias en la fiscalización del Consorcio Patronato del Festival de Teatro Clásico de Mérida. Portillo afirmó que cuando tomó posesión del cargo le presentaron un análisis de cuentas en las que figuraban algunas deudas, pero no otras de las que está teniendo conocimiento ahora.

No obstante, desde la dirección artística no se tiene "ningún control sobre las cuentas, ninguno, ni capacidad para firmar ni para poder mirar más allá de lo que te informan", aclaró Portillo, "Ya ni te cuento de 2006 o 2007, no tenemos la más remota idea", aseveró la actriz, que añadió que "algo habrá pasado" cuando se está investigando.

La directora del Festival de Mérida destacó la "valentía y generosidad" del director mexicano Mauricio García, "en las antípodas del mundo grecolatino", para "cruzarse el Atlántico y arriesgarse a trabajar con un equipo humano al que no conocía de nada". Portillo explicó que admira el arte mexicano por "lo violento de su compromiso y su pasión" e incidió en el referente que para ella supone el país centroamericano, donde la mujer tiene un lugar "muy doloroso". El actor director y traductor mexicano, por su parte, explicó que su "Antígona" será "muy fiel" al texto de Sófocles, pero con el filtro "ético" y "estético" de una compañía contemporánea, para lo que ha contado con un equipo totalmente español y un elenco de 46 actores y bailarinas. García habló de "síntesis poética" para referirse al planteamiento estético de la obra, en la que determinados símbolos como el agua y las cenizas plantean los conflictos universales que residen en Antígona. El director explicó que la obra no será estrictamente tradicional, pues en ella se ha dividido el coro en dos, uno de hombres vivos que van envejeciendo durante la obra, y otro de niñas a punto de ser mujer que son asesinadas al principio de la representación.

Para la donostiarra Marta Etura, que protagoniza a Antígona, ha sido un "regalo de la vida" trabajar con el equipo que ha conformado García, al que calificó de "muy inteligente y con una visión muy clara de lo que quiere hacer". Por su parte, la actriz argentina María Botto, que encarna a Ismenes, la hermana de Antígona, indicó que no se pudo negar a aceptar su papel en esta versión del dramaturgo Ernesto Caballero, a pesar de "los dolores, los temores y el viaje doloroso" que le ha supuesto. El reparto de esta obra, que se representará hasta el 28 de agosto, lo completan los actores extremeños Antonio Gil, Alberto Amarilla y Elías González, además de David Luque y Rosa Manteiga.