Vitoria. Se acabó. O, por lo menos, esa es la intención de Caja Vital. La gran apuesta cultural de la entidad para el siglo XXI no depende ya ni del proceso de fusión de las cajas vascas. Hace ya meses, como publicó en exclusiva DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, que se había tomado la decisión de no inaugurar y poner en marcha la nueva sede de Krea en Betoño hasta, por lo menos, ver qué sucedía en esa unión entre Vital, BBK y Kutxa. Pero ayer, el presidente Carlos Zapatero fue un paso más allá y, en una entrevista en Radio Vitoria, aseguró que el proyecto artístico iniciado hace casi cinco años por su antecesor, Gregorio Rojo, no tiene sentido en el actual contexto de crisis económica y que, por tanto, debe transformarse para buscar al edificio, que ha costado 18 millones de euros, otros usos más rentables que pudieran ser compatibles o no con las actividades de creación.
Al parecer, la decisión final no está tomada todavía, pero todo hace indicar que el máximo responsable de la caja tiene la intención de, cuando menos, recortar de forma considerable el planteamiento impulsado por Rojo, lo que en la práctica se traduciría en el desmantelamiento real del ambicioso proyecto en el que se unen no sólo cuestiones de creación y conocimiento con un enfoque especial hacia los jóvenes, sino también medioambientales y sociales.
La crisis y sus consecuencias, que para la Obra Social de la Vital están siendo bastante virulentas, son los argumentos esgrimidos por Zapatero para impulsar este replanteamiento con el que se quiere, en el fondo, usar un edificio que lleva terminado varios meses para otras cuestiones referidas al mundo empresarial, actividades que sean más rentables, economicamente hablando. Para ello, además, el presidente esgrimió una serie de cifras sobre lo que, según él, costaría abrir y mantener el centro cultural tal y como lleva planteado desde hace cuatro años y medio. En realidad, según conoce este periódico desde hace meses, el presupuesto anual de Krea otra vez puesto en marcha era de tres millones de euros, uno de los cuales ya estaba seguro que se iba a recuperar a través de diferentes convenios, colaboraciones y recursos propios.
Aunque todavía hay que esperar a que se tomen las decisiones en firme y de las declaraciones se pase a los hechos, todo hace indicar que la caja alavesa ha decidido desestimar el proyecto y dar carpetazo a un centro en el que, según diversas fuentes, Zapatero no ha creído desde que llegó a la entidad.
Toda esta situación se une al delicado momento en el que se encuentra Montehermoso tras el anuncio por parte del Ayuntamiento de Gasteiz de su intención de cambiar el modelo actual de gestión del espacio. Y habrá que esperar, además, qué decisión toma la nueva Diputación con respecto al Proyecto Amarika, conocida la postura crítica del PP durante la anterior legislatura con respecto a este otro foco cultural.